Migración y violencia, los ejes de la propuesta escénica "Passport"

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Foto: Agencias. Escenas un poco fuertes se suceden, sobre todo durante la tortura que padece Eugenia.

Notimex / La Voz de Michoacán

Ciudad de México. Sin identidad, origen o destino, una mujer deambula en un país extraño en busca de encontrarse, en la puesta en escena “Passport”, de Gustavo Ott que, bajo la dirección de Alet Rojas Contreras, se estrenó en el Teatro Sergio Magaña, de esta ciudad.

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En el marco de la Itinerancia de la Muestra Regional de Teatro, se escenificó la obra a cargo de la compañía Matrioska, de Guerrero, que cuenta la historia de una mujer extranjera que llega a un país extraño, donde tendrá que enfrentarse a sus temores y darles respuesta.

En la propuesta escénica, unas 25 personas fueron colocadas en el escenario junto con los actores a vivir esa experiencia de escucharlos, verlos y respirar a pocos metros, ofreciendo una visión de lo que podría suceder a quienes llegan a un país extranjero sin saber su idioma.

Con una escenografía sencilla, únicamente un escritorio y algunos utensilios como una escoba y cubetas, los actores Alet Rojas (Eugenia), Illian Blanco (Soldado) y Leonardo Cuesta (Oficial), desarrollan la historia.

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El hilo conductor del montaje es el pasaporte, un papel de identificación que Eugenia tiene y entrega al soldado para identificarse, pero éste lo esconde para poder torturarla verbal y físicamente.

Y es que además del tema de la migración, el dramaturgo venezolano también se asoma al abuso que puede padecer una persona en una estación de tren, ubicada en una frontera.

Escenas un poco fuertes se suceden, sobre todo durante la tortura que padece Eugenia, pero que muestra el abuso de la autoridad, que al final la deja ir, porque es inocente y porque ya saben quién es y de dónde.