Es sabido por todos que en México el tener una gasolinera, es como tener una mina de oro. Y cómo no. A los gasolinazos que constantemente nos vemos sometidos los ciudadanos, tenemos que agregarle a las empresas corruptas que venden “litros” que no son litros y por supuesto, el viejo truco de la clonación de tarjetas. Pero, ¿cómo funciona este sistema en una gasolinera? En el siguiente video observarán el aparato que los encargados de estos establecimientos les proporcionan a los despachadores y conocerán el testimonio de un empleado que asegura le piden cuotas de tarjetas clonadas. Ya basta de robos ¿no?