Miguel Bosé cautiva al público en concierto

La Voz de Michoacán. Las últimas noticias, hoy.

bose_auditorio2_int

El cantante Miguel Bosé ofreció la noche de este martes un concierto en el Auditorio Nacional como parte de su gira "Amo", con la que retomó diversos éxitos que sacudieron los recuerdos de la audiencia.

PUBLICIDAD

Sonidos de aves sumergieron al público en una atmósfera natural, en donde cuatro jaulas aparecieron de pronto en el escenario por el que desfiló el cantante totalmente vestido de blanco.

Ello ante los gritos de la audiencia a la que ofreció "Amo", mientras las jaulas se llenaban de colores y el ambiente de declaraciones de amor por parte del artista.

El repertorio del intérprete siguió su recorrido con "Encanto", mientras los objetos en el escenario se pintaban de negro y rojo para volverse a transformar con colores claros.

PUBLICIDAD

En seguida sonaron las estrofas de "Libre ya de amores", ante la sorpresa de los presentes que llenaron el auditorio creando un coro apoyado por los propios coristas de Bosé que aparecieron también vestidos de blanco.

En medio de lo que ya empezaba a parecer una fiesta el músico recordó temas como "El hijo del capitán trueno", que levantó a algunos de sus asientos para bailar con pasos cortos como los coristas y músicos que tomaron el estrado junto a Bosé.

El recuerdo tomó forma de canción con "Salamandra", mientras pinturas chinas de mujeres y dragones se proyectaban en las cajas moviéndose al ritmo de la música que despertaba los sentidos, que también se estremecieron con "Nena", recreada en la voz de cada uno de los 10 mil asistentes.

Entre rayos de luz azules y estrellas revoloteando en el escenario Miguel Bosé regaló "Aire soy", que logró poner a todos de pie para entrar en la cadencia de la música que provocó sutiles movimientos en el cantante.

Bosé se llenó de energía para interpretar "Horizonte de las estrellas", entre imágenes estrambóticas que se sacudieron en el escenario como el propio intérprete.

Viajando entre la calma del romanticismo de "Sólo si" y la frialdad de "Te comería el corazón", el artista entregó sus versos con su voz, la nostálgica guitarra y el lamento que se convirtió en declaración con "Sevilla", que culminó con el artista arrodillado y persignándose.

Las imágenes de un desierto que aparecieron en el escenario dieron la entrada perfecta para recordar el poder de "Si tu no vuelves", que se transformó casi en un himno al amor que unió las voces de los presentes que nutrieron el canto de Bosé.

Las palabras de amor de "Tu mi salvación" se transformaron en reclamo con "Dame argumentos", que culminó con una explosión de instrumentos e imágenes frenéticas.

Las primeras estrofas y notas de "Nada particular" llamaron al público a la libertad, guiado por el artista que se posó con seguridad en medio del escenario con la música sonando y elevando su mensaje universal de unidad, alzando los brazos de los presentes, cada uno miembro del coro de miles de cabezas.

Luego de "Partisano" el cantante siguió retomando éxitos de su carrera como "Como un lobo", "Morena mía" y "Si se puede", los cuales fueron reconocidos de inmediato por el público del que se despidió por un momento.

En medio del enigmático ambiente el español se hizo presente de nuevo para establecer el sello de su interpretación en "Que no hay", que cerró proyectando estrellas desde su saco abierto.

"¿México qué quieres que te dé?" cuestionó el artista para sumergirse en temas emblemáticos como "Bambú" y "Bandido".

El cantante que también se presentará el 11 y 12 de junio en el mismo recinto finalizó su presentación entre un aplauso desbocado luego de interpretar "Te amaré" y "Por ti".