¿Sabes qué provoca la disautonomía?

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Foto: Archivo. Hay algunos padecimientos que tienen mayor incidencia en pacientes femeninos

Notimex/La Voz de Michoacán

Ciudad de México. En el mundo 70 millones de personas han sido diagnosticadas con disautonomía, la cual es una falla del sistema nervioso central autónomo, encargado de regular funciones vitales como la respiración y la actividad del sistema gastrointestinal.

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En México no hay registro de casos de este padecimiento que puede presentarse a cualquier edad, cuyos síntomas más comunes son: taquicardia, mareo, debilidad o cansancio, dificultad cognitiva y visión borrosa, destacó la Secretaría de Salud en un comunicado.

Gabriela Chávez Basurto, responsable de Nutrición Clínica en la Unidad Médico Quirúrgica del Hospital Juárez del Centro, advirtió que el mayor riesgo para los pacientes son las fracturas, ya que les baja la presión arterial, disminuye la frecuencia cardiaca y ocurre el desmayo.

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Una persona con disautonomía no debe permanecer mucho tiempo de pie y si lo está, tiene que moverse y contraer los músculos de las extremidades: manos, piernas y glúteos para estimular la circulación sanguínea y evitar el desvanecimiento, subrayó.

Recomendó a los pacientes comer cada dos o tres horas en pequeñas porciones; reducir el consumo de azúcares simples como refrescos y pasteles; cuidar la ingesta de sal y mantenerse hidratados con líquidos variados como agua de coco, agua mineral y jugos, para evitar que los síntomas se agudicen.

Aunque aclaró que beber agua simple en grandes cantidades no es recomendable, debe hacerse a sorbos durante todo el día para mantener hidratado al organismo.

Chávez Basurto indicó que el consumo de cafeína está restringido para un disautónomo, sin embargo, para las personas que no pueden iniciar su día sin una taza de esta bebida o de alguna otra con efecto diurético, se puede combinar con algún alimento para evitar que el organismo elimine demasiados líquidos.

Detalló que la disautonomía se clasifica en primaria y secundaria. En la primaria se desconocen las causas, mientras que la secundaria aparece a raíz de enfermedades autoinmunes como la tiroides.