Marchan contra la Privatización de los Servicios de Salud

La Voz de Michoacán. Las últimas noticias, hoy.

Michoacán se unió a la marcha nacional en contra de la Privatización de los Servicios de Salud; personal del Sector Salud en la entidad y parte de la derechohabiencia y usuarios vestidos de blando exhortaron al pueblo en general a que no se deje engañar por las reformas de Salud que está imponiendo el Gobierno Federal, debido a que generará una psicosis en la atención médica por la no atención de las enfermedades crónico-degenerativas.

Como lo hicieron en otras entidades federativas el día de ayer, la base laboral del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) y de la Secretaría de Salud en Michoacán (SSM), partieron alrededor de las 17:15 horas del Monumento al General Lázaro Cárdenas al primer cuadro capitalino para postrarse a las afueras del Congreso del Estado, donde la Comisión de Salud recibió a un grupo de profesionales para ver esta situación.

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La Avenida Madero Poniente fue el escenario para el centenar de trabajadores y derechohabientes del Sector Salud Michoacán, donde no hubo paradas en las oficinas de las delegaciones del ISSSTE y el IMSS, mucho menos una pasada a las oficinas centrales de la SSM.

La suspensión de los esquemas de jubilación y fijando su negativa total a la creación de un sistema de salud universal, ya que afecta no sólo sus interés, sino la de todos los mexicanos, fueron las principales demanda que exhibieron los manifestantes, quienes fueron rechazados por el presidente de la Mesa Directiva del Congreso del Estado, Sarbelio Molina, quien detuvo la sesión para retirarse del recinto ante la manifestación que se encontraba a las afueras de la 72 Legislatura.

Al grito de “¡la salud no se vende, se defiende!”, los médicos, enfermos, administrativos y la derechohabiencia de las diversas instituciones de salud refirieron que existe una total desinformación, porque nadie sale a darles la cara y manifestarles la verdadera situación en la que se encuentran, más por la supuesta privatización de los servicios médicos, principalmente para la atención de las enfermedades crónico-degenerativas.

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Uno de los trabajadores del IMSS en Michoacán, Carlos Murillo expuso que el daño que hará la privatización de los servicios de salud es enorme, principalmente porque son miles los pacientes que tienen diabetes e hipertensión arterial, así como sus consecuencias, que deberán pagar cantidades exuberantes de dinero para poder sobrevivir.

A lo anterior, ejemplificó que los pacientes más afectados serán los de insuficiencia renal, debido a que se están subrogando los servicios y posteriormente las dependencias dejarán de proporcionar, orillando a que los trabajadores y derechohabientes enfermos lo tengan que pagar.

Destacó que la atención que se pretende dar es como lo hacen en los países de Estados Unidos y España, donde las personas tienen que comprar seguros médicos para acceder a los servicios de salud y no mediante la seguridad social que proporcionan la base trabajadora como parte de su salario.

Sin importar las inclemencias del clima, el centenar de personas marchó por un lapso de 45 minutos por la Avenida Madero, desde el Monumento al General Lázaro Cárdenas hasta el Congreso del Estado, pasando las delegaciones del ISSSTE e IMSS sin afectación alguna, ni parada.

A las afueras del Congreso, el clima hizo de las suyas y comenzó a llover, pero no fue motivo para que los manifestantes se dispersaran, provocando que la avenida estuviera cerrada por más de dos horas.

Los grandes ausentes, a pesar de su asistencia, fue de los elementos de la Fuerza Ciudadana, debido a que los manifestantes tuvieron que “torear” a los vehículos que circulaban por la zona, principalmente del Monumento a la altura de Catedral, cuando los elementos de seguridad creyeron que la manifestación quedaría en Palacio de Gobierno, no así al ingresar a la cuadra, entre Pino Suárez y Morelos Sur para cerrar por completo el Congreso.

En dicho recinto, los diputados continuaban en sesión legislativa, la cual se vio suspendida para que la Comisión de Salud atendiera una comitiva para conocer sus problemáticas; Sarbelio Molina salió del recinto entre abucheos y rechiflas de los manifestantes por no atenderlos personalmente.