"Sigo soportando la cruz, estoy crucificado, pero no entre ladrones" Alberto Suárez Inda

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Imagen: Samuel Herrera Jr.

El Papa Francisco aún no ha notificado al Arzobispo de Morelia, Alberto Suárez Inda, cuándo podría abandonar su cargo tras haber presentado su renuncia hace casi ya un año, según lo establecido en el Código de Derecho Canónico, donde se señala que los obispos diocesanos deberán dimitir al llegar a los 75 años de edad.

Monseñor señaló que hasta que el Sumo Pontífice no disponga lo contrario, él continuará al frente del gobierno pastoral de la
Arquidiócesis de la capital michoacana.  “Aquí estamos todavía soportando la cruz, estoy crucificado pero no entre ladrones”, expresó el jerarca religioso.

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En un comunicado publicado a inicios de este año en el portal web de la Arquidiócesis de Morelia, el prelado compartió que en la carta que envió al Papa Francisco, manifestó su deseo de que pronto pudiera ser nombrado un nuevo Pastor “que venga con vigor y creatividad a impulsar esta noble Iglesia local”.

El escrito lo concluyó señalando que “no me queda más que manifestar a todos ustedes mi cariño y gratitud. Los únicos regalos que les pido son dos: la oración para pedir al Señor me sostenga en la fe y perdone mis muchos pecados y la perseverancia y entusiasmo en el apostolado siguiendo las valiosísimas indicaciones que nos da el Papa Francisco en su Exhortación Apostólica ‘La Alegría del Evangelio’,

Desde finales del 2013, Monseñor Suárez Inda había declarado que al cumplir 75 años de vida, tenía la obligación de presentar ante el Papa Francisco su retiro; sin embargo, también había precisado que éste no ocurría de manera automática, sino que el Santo Padre era quien determinaba en qué fecha se hacía valida.

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En el mes de agosto, y para celebrar sus 50 años de vida religiosa, el Arzobispo de Morelia Alberto Suárez Inda, realizó la ordenación sacerdotal a siete diáconos en el Seminario de la capital michoacana. Ahí, expresó que en ese largo camino el polvo y el fango lo han ensuciado, por lo que pidió al señor de la Misericordia que lo purifique y le permita renovar su deseo de fidelidad.

El próximo 30 de enero de 2015 el prelado cumplirá 76 años de vida y apenas este año llegó al medio siglo de carrera sacerdotal, por lo que continuará a la espera de que el máximo jerarca de la Iglesia Católica con sede en el Vaticano, emita una respuesta a su petición.