La anatomía cerebral de la memoria se define antes de nacer, según estudio

Este estudio subraya que la organización del precúneo no es homogénea, ya que su estructura responde a dos ejes principales: uno longitudinal, que combina información somática y visual, y otro vertical, que integra esa información con la memoria y la consciencia.

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EFE / La Voz de Michoacán

Madrid, España. - La anatomía de la región cerebral que integra la percepción corporal, la visión y la memoria se define antes de nacer, y las diferencias individuales en esa zona, que están muy pronunciadas en edades adultas, ya son perceptibles después del parto, lo que sugiere que están determinadas por factores genéticos o prenatales.

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Un estudio liderado por Emiliano Bruner, investigador del Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN-CSIC) español, demuestra que el precúneo, una región estratégica del cerebro encargada de la consciencia de uno mismo, de la percepción corporal, la memoria autobiográfica y la construcción de la identidad, alcanza sus proporciones y forma casi definitivas antes de los tres años.

Otro estudio reciente del mismo investigador muestra también de forma detallada que en la enfermedad de Alzheimer esta región es progresivamente invadida por los tejidos cerebrales contiguos, a diferencia de lo que ocurre en el envejecimiento normal.

Es, según ha informado el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) español, la primera vez que se hace un estudio del desarrollo desde el nacimiento hasta la edad adulta de esta región del cerebro, una pieza central en la red cerebral humana que se halla escondida en el espacio entre los dos hemisferios cerebrales.

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El trabajo, publicado en la revista Cerebral Cortex, demuestra también que las regiones inferior y superior del precúneo crecen de manera independiente, por lo que no deberían estudiarse en conjunto, como a menudo se hace en la actualidad.

"Situado entre los dos hemisferios cerebrales, el precúneo es una región clave para procesos complejos como la imaginación, la consciencia y la construcción del 'yo'; la parte superior integra información somática y visual para situar el cuerpo en un marco espacial, mientras que la inferior conecta esta información con la memoria episódica (de experiencias personales)", ha explicado el primer autor del estudio, Emiliano Bruner.

Ambas zonas se distinguen porque tienen funciones y cableado diferentes, y por eso es tan importante estudiarlas de manera independiente ya que implican procesos distintos, ha resaltado este experto.

Este estudio subraya que la organización del precúneo no es homogénea, ya que su estructura responde a dos ejes principales: uno longitudinal, que combina información somática y visual, y otro vertical, que integra esa información con la memoria y la consciencia.

Esa complejidad anatómica explica por qué se considera un nodo central en la red cerebral y por qué su variabilidad entre individuos puede tener implicaciones en procesos tan sofisticados como la imaginación o la construcción del 'yo.'

Otro estudio, cuyo primer autor es también Emiliano Bruner, publicado recientemente en la revista Journal of Anatomy, ha analizado cómo cambia el precúneo durante el envejecimiento normal y cuando concurre la enfermedad de Alzheimer.

Para ello se compararon 39 cerebros de personas con esta enfermedad neurodegenerativa, confirmados después de la muerte, procedentes del Banco de Tejidos BT-CIEN, con un grupo de control formado por 42 cerebros de personas mayores sin deterioro cognitivo del Proyecto Vallecas (Madrid), a las que se había hecho un seguimiento durante una década.

El trabajo mostró que en el envejecimiento normal la zona superior del precúneo tiende a mostrar surcos más abiertos por la pérdida de tejido, mientras que la zona inferior reduce progresivamente su tamaño; sin embargo, en personas con alzhéimer esta reducción es más pronunciada y esta región es progresivamente invadida por los tejidos cerebrales contiguos.

Aunque se sabía que el precúneo es una de las áreas más vulnerables en las fases tempranas del alzhéimer, este trabajo describe por primera vez con detalle cómo varía su forma y organización anatómica en comparación con el envejecimiento normal, lo que ayuda a entender por qué la expansión evolutiva de esta región del cerebro en la especie humana es especialmente sensible a la neurodegeneración.