Notimex / La Voz de Michoacán Los Ángeles. El gobernador de California, Gavin Newsom, declaró una emergencia en todo el estado ante la voracidad y rapidez con la que se extienden las llamas que destruyeron hogares y obligaron a masivas evacuaciones. Al menos 200 mil personas se vieron obligadas a dejar sus casas debido a los incendios forestales, mientras que más de dos millones de residentes se quedaron sin electricidad en 38 condados del centro y norte del estado, luego de que la empresa de servicios públicos cortara el suministro eléctrico como medida de precaución para evitar otros incendios. En la región vinícola del norte de California, a las afueras de San Francisco, el incendio "Kincade" creció a aproximadamente 20 mil 200 hectáreas y está contenido en un 10 por ciento, dijo Newsom. El gobernador estimó que 180 mil personas fueron evacuadas debido al incendio, que el Departamento Forestal y de Protección contra Incendios de California (CalFire) dice que destruyó 79 estructuras. En tanto, el incendio "Tick", cerca de Santa Clarita en la parte sur del estado, destruyó al menos 22 estructuras. Los fuertes vientos de los últimos días, de hasta 140 kilómetros por hora, dificultan la labor de los bomberos. Tampoco ha sido fácil la evacuación debido a los cortes frecuentes de energía. El mayor temor ahora es que los cables derrumbados desaten nuevos focos, o incluso se extienda hacia las carreteras más transitadas El gobernador también anunció un programa de 75 millones de dólares para que los gobiernos locales mitiguen los impactos de los cortes de energía para prevenir más incendios. Las últimas órdenes de evacuación se produjeron después de que Pacific Gas & Electric cortara el suministro eléctrico a 2.3 millones de personas en 38 condados a partir del sábado por la noche, señaló Telemundo. Mientras tanto, otro incendio estalló el domingo a ambos lados de una autopista del Área de la Bahía de San Francisco y se extendió rápidamente, acercándose peligrosamente a las casas en Vallejo, que está a 88.5 kilómetros al sur de Geyserville, donde arde el enorme incendio Kincade.