Jorge Manzo/La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Nunca antes en Morelia había sido montada una puesta en escena que rescatara los villancicos navideños como ocurre en Villancikua, la obra con la que el Teatro Mariano Matamoros despide el 2021 y le da la bienvenida al 2022. Acrobacias y música sumergen a la audiencia en un mundo que poco a poco se va extinguiendo. Villancicos coloniales y las canciones michoacanas más representativas de la temporada le dan vida al escenario principal. Y quizá se podría narrar cada número, que en total duran casi dos horas, pero lo más valioso es vivir la experiencia que producen los 12 cantantes solistas, 8 músicos tradicionales, 6 músicos especialistas en música colonial, 3 acróbatas aéreos michoacanos y tres invitados, así como el Coro Juvenil de las Rosas, que se apoderan del teatro para despertar el verdadero espíritu navideño, alejado de la mercadotecnia y de las influencias anglosajonas. Santiago Cumplido del Castillo es el responsable de dirigir al talento artístico. No es una tarea sencilla, pero ya ha montado otras dos obras en el mismo escenario robándose las ovaciones de Morelia. Él cuenta a La Voz de Michoacán que el hilo conductor de toda la puesta en escena es la música en español. Esa es la esencia, pero la tecnología juega un papel protagónico con la proyección de un videomapping. Las voces y los instrumentos vibran con potencia. Es uno de esos shows que no se ve todos los días. El telón estará abierto hasta el 9 de enero, excepto los lunes. Vestuarios, producción, todo, es una combinación perfecta que es considerada por el director de la compañía Zingulart, una joya cultural para toda la familia. Música virreinal, folclórica, tradicional y vernácula acompañan a los actores, en su mayoría michoacanos. “La obra nos ayuda a revivir el espíritu navideño en español y recobrar las tradiciones y todas esas piezas que han sido olvidadas. Buscamos darle una versión contemporánea para que los jóvenes las conozcan, y los mayores se reconecten”, dijo el director, quien aprovechó para invitar al público moreliano a que no pierdan esta oportunidad, pues es la mejor manera de celebrar la Navidad y el Año Nuevo viviendo la pasión del teatro. La propuesta de Villancikua es de música en español que fusiona géneros tradicional, colonial, popular michoacana y mexicana, en un programa entrelazado de estilos, con composiciones de Miguel Bernal Jiménez, Zumaya, Padilla, Capillas, Matías y otros autores mexicanos, así como piezas anónimas de tradición inmemorial como "Los Peces en el Río", "La Marimorena" y muchas más. “La gente sale fascinada, le ha gustado muchísimo todo lo que es Villancikua, incluso, hemos recibido ovaciones y eso nos da mucha alegría. Queremos que más personas acudan al teatro, que conozcan nuestra propuesta y que tengan la Navidad que se merecen, pues éste es un regalo significativo, que puede convertirse en el mejor regalo para alguien”, dijo el también director de Tzintzun y Ánima, dos puestas que rompieron todos los récords. El director compartió que se construyó un diálogo con el formato adecuado al público michoacano, para que esté a la medida y sea accesible para todos. Es una producción grandilocuente, dijo muy emocionado, quien confesó que cada uno de los números está hecho con mucho profesionalismo y cariño para el público, que espera que no pierda esta oportunidad, independientemente de que se prevén más obras y puestas en escena. Las acrobacias aéreas, los instrumentos tradicionales y las imponentes voces por sí solas despiertan curiosidad por saber cómo se escucharán en el recinto más importante de la cultura. Cada movimiento que se hace en el escenario es con cariño, altruismo y corazón, dijo el también músico, quien insiste en que la personalidad michoacana se enaltece y permea entre los asistentes, quienes reciben esa riqueza que se guarda en sus rincones del estado. Ireri Mejía es moreliana y una de las voces que le da vida a Villancikua. Durante la charla compartió que el set list está conformado por villancicos sin el corte gringo que se venía acostumbrando en estas temporadas y que se monta en otros espectáculos, sin embargo, resaltó que ahora se tiene una fusión mexicana-novohispana, y se pueden escuchar desde sones jarochos hasta de la Tierra Caliente michoacana. “Es una fusión de varias tradiciones culturales, pero todas hispanoamericanas, barrocas, clásicas, pero también de la tradición popular”, dijo la cantante, quien resaltó que esta obra deja múltiples mensajes, entre ellos el rescate de lo que es México. Cada uno de los villancicos tiene arreglos muy particulares que se hicieron especialmente para el montaje. No puede faltar la música de la meseta purépecha. Cecilia Isabel Correa es acróbata y junto con sus compañeros le dan el movimiento desde el aire a la obra. Saben que la música es lo principal, sin embargo, para darle vistosidad y que nadie deje de sorprenderse durante el show también hay movimientos que se realizan en solista o dúos. Los trapecios y los aros surcan el cielo del teatro Mariano Matamoros. Para ella es muy grato presentarse en Morelia, justo porque es de aquí, y ahora ya no tiene la necesidad de emigrar a otra ciudad para hacer lo que le apasiona y ama. Estudió danza y tuvo que salir de la capital y apenas esta oportunidad le devolvió la ilusión de estar con su familia en fechas tan importantes como Navidad y Año Nuevo. Así pues, Villancikua se convierte en el principal escaparate cultural para que en estas fiestas de fin de año puedan vivir un espectáculo del nivel de Morelia. Está dirigido para todas las edades. Las funciones se realizarán hasta el 9 de enero, de martes a jueves a las 19:00 horas; viernes y sábado 19:00 y 21:00 horas; los domingos 12:30 y 17:00 horas. Venta de boletos en Villancikua.com y en taquilla del Teatro Mariano Matamoros, admisión general a partir de 3 años, desde $440 a $550, pregunta en la taquilla del Teatro por las promociones.
La Voz de Michoacán
