La paternidad, un tema literario

Mara Rahab Bautista López

Este domingo 18 de junio se celebra en México el día del padre, pretexto para escribir sobre algunos libros que tratan este tema como central; la idea del padre es en realidad las ideas del padre, las idealizadas, las construidas por la sociedad, por las familias, por la cultura, pero ¿qué es un padre? Y sobre todo ¿qué se espera de un padre?  ¿qué es ser un buen padre?

Sin duda aquí todxs tenemos un padre  pero también una idea sobre él, para entrar a las ideas de otros padres, para reconocer el nuestro o el que quisiéramos, existe en la literatura, así que vamos a charlar sobre varios libros sobre el tema que nos parecen valen la pena.

Comenzamos con un libro dedicado a las infancias Papá escapó con el circo del escritor israelí Etgar Keret, en este libro el papá de una familia convencional se escapa con el circo que estaba de visita en la ciudad, después de que la familia completa asiste a una función, él se da cuenta que siempre quiso ser circense, pide trabajo ahí y se une a la gira, varios meses después regresa, mientras tanto, la mamá se encarga de todo -casa, hijes, cuidados-, un divertido libro con mucho por reflexionar.  

La familia de Sara Mesa, en este libro los protagonistas son un padre que convierte su quiebre  personal e íntimo en autoritarismo solemne, la madre llena de frustración silenciosa, dos hijos completamente opuestos, una hija discordante, una sobrina adoptada, en esta familia todos desbordan dolor y soledad. Una novela que arremete contra los falsos sueños de bienestar de la familia (recomendamos todos los libros de Sara Mesa).

La cabeza de mi padre de Alma Delia Murillo, un libro que refleja la triste realidad de muchas de las familias monoparentales en este país, en el que muchos de los padres se ausentan por años, décadas, por vidas enteras y esa ausencia no solo se refleja en la nostalgia de un padre, la fantasía de una familia “completa”, en esta historia autobiográfica la autora subraya los graves consecuencias de la ausencia  en la desigualdad económica por lo tanto social, las violencias a las que estas familias se someten para salir adelante, la sobre carga de responsabilidades para la madre y como la  irresponsabilidad, tibieza, miedos merman y violentan muchos aspectos en la vida de lxs hijxs y la madre.

Literatura infantil de Alejandro Zambra, es el último libro este autor chileno en el que combina relatos de ficción y no ficción sobre infancia y paternidad, si conocen la obra de Zambra sabrán que los relatos van más allá de un desenlace, siempre nos sorprende con reflexiones profundas y desde otro lugar, si no conocen la obra de Zambra, recomendamos mucho acercarse a sus libros.

Las lealtades de Delphine Vigan, esta escritora -que nos encanta-, ha recibido el Premio de Novela Fnac, el Premio de Novela de las Televisiones Francesas, el Premio Renaudot de los Institutos de Francia, el Gran Premio de la Heroína Madame Figaro y el Gran Premio de las Lectoras de Elle. En Las lealtades hay padre deprimido que no sale de su micro departamento, una madre llena de resentimiento hacia él y un hijo que desde una muy corta edad se envuelve en el alcohol para sobrellevar la vida con esos padres que llenan sus vidas de violencia.

Matar al padre, Amelie Nothomb, la vigésima novela de una de las autoras más prolíficas y premiadas de estos años, nos regala una novela sobre las relaciones paterno-filiales y el complejo de Edipo. (Dato curioso: la autora escribe a mano todas sus obras).

La muerte del padre de Karl Ove Knausgard, es el primer número de la serie Mi lucha, compuesta por seis libros en los que repasa su vida. En La muerte del padre, es esta muerte la que detona una serie de recuerdos, reclamos, para las lectoras y lectores es percibida con todos sus matices, desde los cruelmente mundanos hasta los insospechadamente simbólicos.

El padre muerto de Donald Barthelme, Un escritor norteamericano  que hace honor en este libro al surrealismo poniendo la figura del padre como un gigante que pesa toneladas, al quererlo trasladar a su entierro se mueven miles de personas para poder llevarlo y en el camino van pasando cosas surreales que tejen una metáfora del peso de la figura paterna.

Un hombre con suerte de Jamel Brinkley, en su libro de cuentos se hace varias preguntas sobre la masculinidad cómo: ¿cuál es el costo de ser hombre? Y sobre las relaciones entre padres e hijos, aquí un pequeño fragmento de uno de sus cuentos:

“…Les conté que mi padre amaba a su mujer y a toda su familia. Lo que más le gustaba era cuando nos venían a visitar mis tías, las hermanas menores de mi madre. En aquel momento yo era un niño y, antes de que llegaran las visitas, me sentaba en el borde de la bañera y pasaba un dedo por la cortina de la ducha mientras miraba cómo él se embellecía. Se ponía colonia y alguna de sus mejores camisas y probaba si quedaba mejor con uno o dos botones abiertos. Se aseguraba de que sus mejillas tuviesen apenas una sombra de barba. Durante la reunión seducía a todos mientras preparaba tragos, besaba los dorsos de las manos y admiraba los peinados nuevos. Alababa a mis tías, que eran todas atractivas, repartiendo elogios con generosidad. Yo siempre lo adoré.”

Y no queremos dejar de mencionar dos de los clásicos sobre el tema: Pedro Páramo, de Juan Rulfo y Matar un ruiseñor, de Harper Lee.

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