Las posadas, una tradición de origen mexicano previa al nacimiento del ‘verdadero Sol’ para los católicos

Hoy inician estas celebraciones que se prolongan hasta el 24 de diciembre. ¡Conoce cómo nacieron!

Juan Carlos Huante / La Voz de Michoacán

¡En nombre del cielo, os pido posada…! Peregrinos, rezos, cantos, velas, piñatas y aguinaldos, así son las tradicionales celebraciones previo a la Navidad.

PUBLICIDAD

En templos, colonias, en muchos hogares, personas de todas las edades se reúnen durante 9 días para acompañar a María y José en su peregrinaje rumbo al nacimiento del Niño Jesús. ¿Sabías que las posadas tienen su origen en México?

¿CÓMO NACIERON LAS POSADAS?

Como ocurrió con el origen de la celebración de Navidad, tomando en cuenta las fiestas saturnales romanas durante el solsticio de invierno (17 al 23 de diciembre) para preparar la llegada del Sol Invencible, el día 25, a fin de convertir a los paganos en cristianos, así inició la tradición de las posadas en México en espera del nacimiento del “verdadero Sol” para los católicos: Jesucristo.

Estas celebraciones, inculturación del tiempo de la colonia, también asumieron elementos paganos para convertirlas en un medio de evangelización.

PUBLICIDAD

Cuando llegaron los españoles, los aztecas celebraban la llegada del dios de la guerra Huitzilopochtli en el mes llamado panquetzaliztli entre los días 6 y 26 (equivalente al mes de diciembre).

Durante este periodo, en espera del solsticio de invierno, colocaban banderas en los árboles frutales y estandartes en el templo principal en señal de coronación de su dios.

La gran fiesta iniciaba la noche del 24 que se prolongaba todo el 25, y en todas las casas se ofrecía comida a los invitados y unas pequeñas estatuas de pasta llamadas “tzoatl”.

Estas fiestas fueron aprovechadas por los misioneros agustinos, una de las primeras tres órdenes religiosas que llegaron a la Nueva España –las otras fueron dominicos y franciscanos– para darles un nuevo significado: acompañar a María y José en su peregrinar hacia Belén, donde nacería “el verdadero Sol de Verdad y Justicia”, Jesús.

Fue hasta 1587 cuando Fray Diego de Soria obtuvo un permiso especial del Papa Sixto V para celebrar un novenario de misas nocturnas en los días previos a Navidad, del 16 al 24 de diciembre.

Así, la primera celebración de las antes llamadas “Misas de aguinaldos” se llevó a cabo en el convento agustino de Acolman, cercano a Teotihuacán.

Primero se celebraban en atrios de las iglesias y en capillas abiertas, donde los evangelizadores impartían lecciones de catecismo a los indígenas.

Y a partir del siglo XVIII, las posadas cobraron fuerza popular en barrios, calles y patios de las viviendas; se introdujeron elementos más atractivos como villancicos, pirotecnia y tiempo después la piñata.

La tradición mexicana también ha traspasado fronteras, extendiéndose a otras regiones de América como Colombia, Ecuador y Venezuela.

¿CÓMO CELEBRAR LA POSADA?

1. Una vez reunidos en el lugar donde se realizará la posada, primero se reza el Rosario.

2. Al concluir el quinto misterio del rezo, en procesión se acompaña a los peregrinos mientras se canta la Letanía, que es una serie de invocaciones que se hacen a la Virgen con la finalidad de alabarla en sus distintas advocaciones.

3. Luego se pide la posada, donde las personas, dividas en dos grupos (peregrinos y posaderos), se colocan adentro y afuera de la casa o alguna habitación, respectivamente, y se entona el tradicional canto.

AFUERAADENTRO
En el nombre del cielo
os pido posada,
pues no puede andar
mi esposa amada.
Aquí no es mesón,
sigan adelante.
Yo no puedo abrir,
no sea algún tunante.
No seas inhumano,
tennos caridad,
que el Dios de los cielos
te los premiará.
Ya se pueden ir
y no molestar,
porque si me enfado
os voy a apalear.
Venimos rendidos
desde Nazaret,
yo soy carpintero
de nombre José.
No me importa el nombre,
déjenme dormir,
pues yo ya les digo
que no hemos de abrir.
Posada te pide,
amado casero,
por solo una noche
la reina del cielo.
Pues si es una reina
quien lo solicita,
¿cómo es que de noche
anda tan solita?
Mi esposa es María,
es reina del cielo,
y madre va a ser
del Divino Verbo.
¿Eres tú José?
¿Tu esposa es María?
Entren peregrinos,
no los conocía.
Dios pague, señores,
vuestra caridad,
y que os colme el cielo
de felicidad.

(TODOS)
¡Dichosa la casa
que abriga este día
a la Virgen pura,
la hermosa María!

(Los posaderos abren la puerta y dejan entrar a los peregrinos)

¡Entren santos peregrinos,
reciban este rincón,
que aunque es pobre la morada,
os la doy de corazón!
¡Cantemos con alegría
todos al considerar
que Jesús, José y María
nos vienen a visitar

4. Finalmente se entregan aguinaldos, se rompe la piñata y el anfitrión comparte alimentos, como atole.

Foto, Jaime Lagunas.