Anahí revela que sufrió un paro cardiaco por desórdenes alimenticios

“Podía pasar cinco o seis días sin probar un bocado”, compartió la actriz y cantante sobre los momentos difíciles y complicaciones de salud que padeció.

Foto: Captura de video.

Redacción / La Voz de Michoacán

Ciudad de México. La actriz y cantante Anahí reveló que cuando tenía 18 años sufrió un paro cardiaco debido a la descompensación en la salud que le causaron los problemas alimenticios que padecía en esa etapa de su vida.

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En entrevista con el periodista Joaquín López-Dóriga, la intérprete abrió su corazón y reveló que llegó a pesar hasta 38 kilos y para ello, pasaba días sin comer o incluso comía hielo para engañar a su estómago.

“Yo podía pasar cinco o seis días sin probar un bocado, a veces comía una toronja, a veces comía hielo para engañar al estómago. Y después cuando ya no podía más venían los atracones y como tanto se han burlado, sí vomitaba mucho”, expresó entre lágrimas.

La actriz detalló que tuvo una disminución tan fuerte de potasio y electrolitos en el cuerpo que sufrió una taquicardia y fue a parar a urgencias.

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“Llegué un día con mi prima Alicia que hasta hoy le digo 'gracias porque me salvaste la vida'. Le dije 'me siento mal, algo me pasa', tenía el corazón a mil y sentía como si el estómago se me estuviera volteando por dentro.

“Estábamos en Interlomas, volteó y se metió directo a urgencias del Hospital Ángeles. Gracias a Dios. Llegué con un paro cardiaco horrible", dijo Anahí, quien agradeció al equipo médico que la atendió.

Anahí señaló que sus problemas alimenticios comenzaron luego de que un productor le dijo que tenía que ser más delgada para ser protagonista de Quinceañera.

“Me dice vamos a hacer la telenovela y pues estaría increíble que tú seas la protagonista, pero Anahí, las protagonistas son flaquitas, las protagonistas son muy bonitas y tú estás gordita”, recordó.

La esposa de Manuel Velasco señaló que a partir de ese momento empezó la pesadilla más grande de su vida, pues no se creía suficiente e inició su enfermedad obsesiva.

“Esas palabras se quedaron en mi cabeza, en mi corazón y en mi mente. Yo salí de ahí y me acuerdo que traté de no decir nada, tranquila. Pero a partir de ese momento, mi esencia cambió, mi luz cambió y todo cambió”, aseveró.