‘De aquí no me muevo sin llevármelo’, dice la mamá de Jesús, el seminarista perdido en el Tzirate

Hoy se cumplen tres días de intensa búsqueda, desde el pasado domingo cuando se reportó la no localización del joven de 17 años, estudiante de la etapa menor del Seminario Diocesano de Morelia.

Redacción / La Voz de Michoacán

Morelia, Michoacán. “De aquí no me muevo sin llevármelo”, es la sentencia de una madre que conserva la fe porque encuentren a su hijo Jesús, el joven seminarista que se encuentra perdido en el cerro del Tzirate, en Quiroga.

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Jesús Salas, originario de Puruándiro, Michoacán, estudiante del tercero de Humanidades de la etapa menor del Seminario Diocesano de Morelia, se encuentra extraviado en esa zona desde el pasado domingo, a donde acudió de excursión con un grupo de seminaristas.

Rosario en mano y una vela encendida en esa zona boscosa donde se encuentra el campamento de búsqueda, la mamá pide a Dios que le regrese a su hijo.

“Dios es grande, y yo lo único que le pido es que me lo regrese, yo lo necesito”, dice entre lágrimas a Revolución Social.

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La madre define a su hijo como una persona de mucha bondad, que siempre se quita el pan de la boca por ayudar a la gente que lo necesita; el que brinda una sonrisa, aunque no lo conozcan; quien desea ser Sacerdote porque trae a Dios adentro y está feliz en el seminario.

Este martes suman tres días de intensa búsqueda, desde que se reportó la no localización de Jesús.

Protección Civil municipal, Seguridad Pública de Quiroga, equipos de búsqueda y Revolución Social trabajan para encontrar al joven de 17 años; este día también se sumarían a las labores expertos de Zitácuaro y Querétaro.

En su casa de formación sacerdotal oran para localizar a su alumno menor y agradecen todo el apoyo que se ha recibido para esta causa.

Pedimos su oración para localizar a uno de nuestros seminaristas menores. Agradecemos el apoyo de las brigadas de apoyo de Quiroga y otras comunidades vecinas que desde el domingo por la tarde han estado trabajando coordinados por Revolución Social. ¡Dios pague!”.

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