En medio de fuerte cerco policiaco, trasladan en bloques a 167 integrantes de Pueblos Unidos ante juez federal

En diversos convoyes trasladan a los detenidos el pasado sábado al edificio ubicado en avenida Camelinas.

Foto: Sam Herrera Jr.

Redacción / La Voz de Michoacán

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Morelia, Michoacán. En medio de un fuerte operativo de seguridad y las presiones de presuntos familiares, pasado el mediodía inició el arribo de los 167 integrantes de Pueblos Unidos –grupo considerado delincuencial por las autoridades– que fueron detenidos el pasado sábado entre Uruapan y Pátzcuaro, a las instalaciones del Poder Judicial de la Federación en Morelia.

Cerca de las 13:00 horas llegó el primer convoy con una parte de los implicados, que responderán ante la instancia federal sobre sus acciones.

De acuerdo con el parte oficial dado a conocer ayer lunes por el secretario de la Defensa Nacional (Sedena), Luis Cresencio Sandoval, estas personas fueron detenidas en un operativo cuando las ubicaron entre Uruapan y Pátzcuaro en un convoy de 24 vehículos y fuertemente armados.

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Según el alto mando militar, los integrantes de Pueblos Unidos se dirigían a atacar al Cártel Jalisco Nueva Generación, pues un día antes ambos grupos habían sostenido un enfrentamiento.

Se les aseguraron 233 armas de fuego, de ellas 176 largas, 57 cortas y un fusil Barret calibre 50; dos granadas de fragmentación, tres aditamentos lanza granadas, 840 cargadores, 23 mil 497 cartuchos y 24 vehículos, cinco de ellos con blindaje.

En las acciones iniciales para detener al grupo que para la autoridad es integrado por delincuentes, participaron 130 elementos de la Guardia Nacional, 75 soldados y 35 policías de la Guardia Civil del estado; luego llegaron en apoyo 270 militares más de la zona militar de Apatzingán y misma cantidad de la que tiene sede en Morelia, además de contar con el refuerzo aéreo de cuatro helicópoteros.

Foto: Sam Herrera Jr.
Foto: Sam Herrera Jr.
Foto: Sam Herrera Jr.

Tras su detención, presuntos familiares y conocidos de los implicados se trasladaron a las instalaciones de la Fiscalía General de la República en Morelia, para pedir su liberación, pues aseguran que “son inocentes”, solo campesinos que se defienden de grupos criminales que los extorsionan, violan mujeres y usan la violencia en contra de sus pueblos.

Además reclamaron que los detenidos estaban haciendo el trabajo que le toca al gobierno, es decir, “estábamos ayudando al gobierno y con eso nos paga, deteniendo a campesinos y no a los que sí son asesinos”, dijo uno de los manifestantes.