IMÁGENES NUESTRAS | Teatro Matamoros, de lo turbio a lo sublime: un referente del arte escénico

La rehabilitación del antiguo cine colonial fue un escándalo por la opacidad y desvíos, lo que alargó los trabajos de remodelación por 13 años

Foto, Samuel Herrera Jr.

Arved Alcántara / La Voz de Michoacán

Morelia, Michoacán. En marzo de 2021, el Teatro Mariano Matamoros reabrió sus puertas después de una historia oscura que marcó la rehabilitación de su edificio: más de una década de retraso en el proyecto, encarecimiento de la obra original y una enorme opacidad. Este recinto artístico se siente muy nuevo para gran parte de los morelianos, pero su historia se remonta a siglos atrás.

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Según la información de archivo, el espacio donde ahora se ubica el Teatro Matamoros fue originalmente una casa colonial que pasó por varios dueños desde el siglo XVIII y fue demolida de forma definitiva en 1938. Más de una década después, en 1950, se inició la construcción del Cine Colonial en el mismo lugar, manteniendo algunos elementos de la fachada original tanto en el primer como en el segundo piso.

Foto, Samuel Herrera Jr.

El Cine Colonial vivió el auge de la Época de Oro del Cine mexicano al proyectar películas de celebridades de la época como María Félix, Pedro Infante, Mario Moreno “Cantinflas”, Emilio “El Indio” Fernández y Germán Cipriano Teodoro Gómez Valdés y Castillo, mejor conocido como Tin Tan. En ese periodo, una visita al cine no era solo una forma de pasar el rato con la familia durante el fin de semana, sino un evento social elegante, en instalaciones más parecidas a las de un salón de baile que a una sala de proyección.

Sin embargo, el Cine Colonial sólo sobrevivió tres décadas ya que, en los años 80, junto con la decadencia del cine mexicano, prácticamente toda la industria se desmoronó y el edificio ubicado en el Portal Matamoros de Morelia fue uno de los numerosos cines que tuvo que cerrar sus puertas.

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Foto, Samuel Herrera Jr.

Pasaron años en los que el inmueble quedó en desuso, en el portal ubicado en pleno corazón histórico de Morelia y nombrado en honor al héroe de la patria que murió fusilado precisamente en Valladolid en 1814. No obstante, esta vocación histórica y patriótica sirvió de base para un proyecto de recuperación del inmueble, que proyectaba un teatro que se inauguraría en 2010 como parte de los festejos del bicentenario de la Independencia y el centenario de la Revolución Mexicana.

Sin embargo, en la fecha programada, el antiguo cine no formó parte de los festejos. Argumentando diversas razones, como recorte de recursos, aumento de los costos de construcción, revisiones del proyecto y otras causas, la reconstrucción del Teatro Mariano Matamoros no se concretó en tiempo y forma.

Foto, Samuel Herrera Jr.

Con el paso de los años, los morelianos se acostumbraron a ver el espacio del antiguo cine como en desuso. Mientras que el resto de los portales del centro histórico de Morelia se llenaban de nuevos cafés, restaurantes, tiendas y establecimientos, el proyecto en proceso se mantenía cerrado con paneles de madera.

La inmovilidad del proyecto llegó a tal grado que en 2017, cuando se retiraron estos elementos y se descubrió la fachada del inmueble, se convirtió en una noticia local relevante.

Foto, Samuel Herrera Jr.

Finalmente, el 16 de marzo de 2021, el Teatro Matamoros abrió sus puertas. En total, la administración silvanista invirtió 162 millones de pesos y se requirieron 5 años para rescatar la infraestructura que había sido iniciada desde 2009 y abandonada tras múltiples señalamientos de corrupción en torno al recurso que manejaba el fideicomiso encargado del proyecto, cuyo presupuesto inicial fue de 190 millones de pesos.

El evento de inauguración contó con la presencia y voz de dos emblemas del teatro michoacano: la actriz Sofía Rojas y Manuel Guízar, actor y director michoacano. Ambos conmovieron con la creación de un recinto que, dijeron, esperan que permita la consolidación y crecimiento de la escena teatral y los artistas locales. Hoy el Teatro Matamoros ha logrado poco a poco dejar su turbio pasado atrás y se ha convertido en un referente de las artes escénicas, la fotografía y el cine.