Salida a Salamanca: llegaron, empezaron algunas cosas y ya se fueron, ¿y a los vecinos quién les responde?

Este lunes la zona del inconcluso distribuidor vial de salida a Salamanca quedó abandonada, mientras los vecinos viven en la ansiedad de que por fin se termine la obra

Foto, Samuel Herrera Jr.

Arturo Molina / La Voz de Michoacán

Morelia, Michoacán. Luego de 18 meses de proceso interrumpido de construcción, conflictos legales, retrasos y otros problemas, finalmente la empresa contratada para edificar el distribuidor vial de Salida a Salamanca se retiró del área de intervención de más de 40 hectáreas.

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“Ni adiós dijeron”, lamentaron los colonos ante la cruda incertidumbre de no saber para cuándo estará concluido el distribuidor vial entre promesas de gobiernos pasados y actuales. De momento, la zona es una obra fantasma.

Desde la mañana del lunes, transeúntes, locatarios y vecinos notaron la evidente ausencia; los obreros armados con palas, cascos y otros equipos de trabajo desaparecieron por completo. Se espera que no sea sino hasta la siguiente semana que la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas (SCOP) del Gobierno de Michoacán asumirá temporalmente los trabajos para intentar ganar algo de tiempo.

El silencio en la zona es casi total; atrás quedó el ruido de excavadoras, tractores y trabajadores, ahora a lo lejos se escucha únicamente parte del tráfico vial, ese que la obra ha colaborado a colapsar. El periodo vacacional y los pocos autos que circulan por otras zonas para evitar los embotellamientos han dejado casi desértica la entrada norte de Morelia.

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Hace dos años, por esta ruta accedían y salían casi medio millón de personas cada 24 horas, al ser el punto de conexión con la Ciudad de México. Al día de hoy, el Libramiento Norte se redujo a un socavón de 3 kilómetros de largo y 30 metros de ancho inundado de aguas negras y lodo, mientras varillas puntiagudas que emergen de la obra negra.

No se ha notificado nada a los vecinos. A pesar del impacto de casi dos años de paralización de la movilidad de al menos 4 colonias, dos vialidades principales y la afectación a casi una decena de rutas del transporte público, autoridades estatales no han compartido información que permita disipar la ansiedad sobre el futuro que depara en torno al proyecto y una posible fecha de conclusión del proyecto.

Desde la semana pasada se observó una disminución progresiva de la presencia del personal de trabajadores, maquinaria y la recepción de materiales. Por segunda ocasión consecutiva desde que inició, la obra volvió a ser prácticamente abandonada en la antesala del conflicto legal con el Gobierno del estado.

Casi frente al Tecnológico de Morelia, quedaron en resguardo los materiales de tuberías de plástico corrugado de un metro de ancho, varillas y otros materiales de construcción por la Guardia Civil del estado de Michoacán, ante el riesgo de que sean robado.

El resto de la obra, permanece “delimitada” por una delgada malla de plástico color naranja sujeta por varillas ancladas al suelo. A pesar de estos intentos, cualquier curioso puede ingresar a la obra a explorar a pesar del peligro que podría traer consigo el intentarlo.

Desde la semana pasada la SCOP anunció que desplegará su propia maquinaria y personal para avanzar en el proyecto. A fin de evitar que la obra “se empantane” el personal del estado iniciará con la revisión y habilitación de las zonas que puedan ponerse a funcionar en próximos días.

De lo anterior, poco ha trascendido. Al menos durante el lunes no se vio la presencia del estado más allá de los elementos de Seguridad Pública desplegados en el resguardo de los materiales de construcción.

Cabe destacar que la estimación para que reanuden los trabajos es de entre 15 y 20 días hábiles mientras se lleva a cabo el proceso de auditoría que permitirá determinar el proceso de obra que se dejó en el abandono, así como los volúmenes de obra que fueron pagados y no entregados por parte de la empresa en el 2021 fue contratada por la administración del entonces gobernador Silvano Aureoles con Conejo.

Una vez concluya este periodo se procederá a contratar a una nueva empresa que haya participado en el proceso de licitación celebrado en el año 2019, a partir de entonces se estiman entre 2 y 3 meses para que concluya el polémico distribuidor vial.