Trabajadores despedidos y sin pago de finiquito reclamarán hoy en la sesión del Congreso del Estado

Ayer mismo el diputado Fidel Calderón Torreblanca, presidente de la Junta de Coordinación Política, subrayó que la 75 legislatura estatal arrancó trabajos con déficit presupuestal, por lo que el Congreso no cuenta con liquidez para solventar los cheques.

Javier Favela / La Voz de Michoacán

Morelia, Michoacán. Alrededor de 300 extrabajadores de la 74 legislatura michoacana tienen pagos pendientes de recibir por finiquito laboral, aseguró el vocero de los despedidos, Noé Camacho, luego de consolidar cifras con personal de la Secretaría de Finanzas del Congreso del Estado. Cada diputado puede ingresar entre 6 y 7 empleados de confianza a la nómina para que hagan el trabajo fatigoso y dedicado.

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El portavoz de los extrabajadores no descartó hacer una nutrida manifestación de despedidos para que los actuales diputados escuchen la voz de la inconformidad colectiva durante la sesión ordinaria del pleno del Congreso convocada para este día jueves.  

Noé Camacho aseguró que los extrabajadores no van a ir a hacer zafarrancho ni borlote ni sabotajes ni chismes de lavadero en la sesión camaral, sino a exponer los montos adeudados por finiquitos y liquidaciones, que oscilan entre los 40 mil y 80 mil pesos por extrabajador, según el salario integral asignado a cada uno.

Ayer mismo el diputado Fidel Calderón Torreblanca, presidente de la Junta de Coordinación Política, subrayó que la 75 legislatura estatal arrancó trabajos con déficit presupuestal, por lo que el Congreso no cuenta con liquidez para solventar los cheques. Prometió pagar a quien tenga derecho y a lo que tenga derecho. “Si alguien quiere demandar, les llevamos su cheque al Tribunal”, instó el también coordinador parlamentario de Morena.

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Al respecto, el vocero Noé Camacho expresó que los extrabajadores tomaron a mal el comentario del diputado Fidel Calderón y como una burla para las familias de los despedidos, al declarar que sí les van a pagar, pero en el Tribunal de Conciliación y Arbitraje (TCA), cuyos laudos tardarían de 5 a 7 años en emitirse, ante el gran cúmulo de expedientes rezagados durante la pandemia, la notoria lentitud en resolver y la demora extra por los recursos de amparo.

El interlocutor señaló que este viernes vence el plazo para que los extrabajadores demanden incumplimiento de obligaciones laborales del Congreso ante el TCA. Sin embargo, también advirtió que los abogados laboristas suelen cobrar honorarios equivalentes al 35 y 50 por ciento sobre el monto económico conseguido en un juicio laboral, lo que queda firmado en contrato de prestación de servicios, generando menoscabo económico para sus familias.

Los extrabajadores de otras legislaturas se confiaron en las promesas verbales de pago de liquidaciones y finiquitos, dejaron transcurrir el tiempo y después no pudieron demandar ni cobrar.

Ayer un puñado de extrabajadores se manifestó afuera de la secretaría de Finanzas del Congreso para exigir que les cubran sus finiquitos con la parte proporcional del aguinaldo, la prima vacacional y la indemnización de 3 meses salariales íntegros. Pocos acudieron ayer, aceptó Camacho, porque muchos no quieren quedar fichados, ya que son técnicos profesionales muy dedicados a su trabajo, siendo los que realmente arrastraban el lápiz para elaborar iniciativas y propuestas que los diputados leen en tribuna.