Hasta 9 mil pesos tienen que pagar ganaderos de Jiquilpan para dar de beber a sus animales

Debido a que otra presa se secó, deben recurrir a la Presa de las Fuentes, que, sin embargo, se encuentra a resguardo de la Comisión Nacional del Agua

Foto, José Luis Ceja.

José Luis Ceja / La Voz de Michoacán

Jiquilpan, Michoacán. Ganaderos de las regiones de Abadiano y Abadiano Alto señalan que autoridades comunales están requiriendo hasta 9 mil pesos por permitirles el abasto de agua para sus hatos de la Presa de las Fuentes, que se encuentra a resguardo de la Comisión Nacional del Agua.

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Lo anterior debido a que la Presa Los Corrales, de la que regularmente se abastecen, se encuentra prácticamente vacía, lo que ha orillado a los propietarios de los pequeños hatos ganaderos a buscar abastecerse de este embalse.

Sergio Bautista, integrante de esta agrupación de ganaderos, señaló que las autoridades comunales, tanto de Abadiano como de Abadiano Alto, les han condicionado el permiso para la extracción del agua a la entrega de 9 mil pesos por propietario, aun cuando la presa es parte de los activos de la Comisión Nacional del Agua, por lo que buscarán un acercamiento con la representación de esta dependencia en la ciudad de Sahuayo para establecer si es legal o no el cobro que pretenden hacer las autoridades comunales.

La problemática por el aprovechamiento del agua de esta presa se remonta hasta la administración 2012-2015, cuando se tuvo que recurrir incluso al Ejército Mexicano para la inhabilitación de la infraestructura creada por los ganaderos y los productores agrícolas para desviar el curso del agua de esta presa que debería llevar al Bosque Cuauhtémoc para fines de riego de la zona arbolada.

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De manera concreta, Bautista Coyt señaló que incluso los ganaderos estarían dispuestos a realizar el pago requerido ante la grave situación por la que atraviesan: “Apenas cayeron las primeras lluvias, de aquí a que se llene la otra presa o se llenen los abrevaderos se nos mueren los animales; sí podemos pagar y si no tenemos dinero les damos hasta vacas, nada más queremos saber si ellos como encargados del orden tienen la facultad de cobrar esa agua”, señaló que en el caso de la presa Lo Corrales, nunca tuvieron problemas para abastecerse de agua y nunca nadie reclamó tener la propiedad del líquido.

Foto, José Luis Ceja.

Tras varias revisiones realizadas a lo largo de las administraciones municipales en turno se detectó que la totalidad del agua que se drena de esta presa acaba en un jagüey o abrevadero establecido en un tramo de este ducto, y del cual se deriva a pequeños canales que terminan en la localidad de El Güirio, donde abastecen a la presa local y dejan sin agua al Bosque Cuauhtémoc, que fue para lo que fue diseñada la presa; ello llevó a las autoridades locales de las administraciones 2012-2015 y 2015-2018 a buscar establecer el diálogo con la Gerencia Regional de la Comisión Nacional del Agua con la intención de esclarecer puntos como la ubicación geográfica de este embalse, el destino del aprovechamiento del recurso hídrico y si existe una organización de usuarios registrada ante la Comisión Nacional del Agua para la explotación del agua para usos ganaderos agrícolas.

Es de destacar que, históricamente, el municipio de Sahuayo ha señalado tener facultades sobre esta presa debido a que, en teoría, se encuentra dentro de sus límites al menos el 50 por ciento del embalse, de hecho es Protección Civil de ese municipio quien realiza las revisiones rutinarias a la estructura de este embalse.