Padres de familia, propensos al sobrepeso y la obesidad

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Héctor Jiménez / La Voz de Michoacán

 

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Morelia, Michoacán. Este domingo 16 de junio, fecha en la que se celebra el Día del Padre en México, millones de jefes de familia fueron festejados con carne asada, carnitas, tacos, mole, pozole y otros antojitos nacionales. Irónicamente, este sector poblacional se perfila como uno de los más descuidados en el ámbito nutricional, ya que en distintos periodos de su vida adquieren hábitos que los vuelven propensos al sobrepeso y la obesidad.

Cuestionada sobre la percepción de que los hombres suelen aumentar de peso después de casarse y aún más después de tener hijos, la licenciada en Nutrición y asesora de guarderías del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Adriana Paredes, respondió que la reducción de horas de sueño o la mentalidad de que “primero coman bien mis hijos y luego yo como cualquier cosa”, son constantes que pueden afectar a los padres de familia.

En los papás primerizos es importante la cuestión del sueño y que cubran sus ciclos completos. Al momento de que nosotros no dormimos bien, vamos a andar más ansiosos al día siguiente, vamos a andar irritables, a tener más hambre, y vamos a comer alimentos con más grasa y eso influye también en la cuestión del peso. Y a veces los papás, si son de la idea de que ‘primero coman bien mis hijos y luego yo como cualquier cosa’, entonces desde ahí nace la educación nutricional, y sí se ve el aumento de peso en los varones cuando ya están en una familia o por los ritmos del estilo de vida que tenemos tan acelerado”, explicó la especialista.

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En torno a la posibilidad de sufrir estrés por falta de horas de sueño u otro motivo, reiteró que la recomendación nutricional es consumir dos colaciones al día entre comidas, que pueden consistir en porciones pequeñas de fruta, verdura, semillas o una ensalada y que sobre todo cumplan el objetivo de evitar que el padre de familia sufra de hambre, se dirija a la tienda de la esquina y termine comiendo un alimento empaquetado y rico en grasas o azúcares.

A veces el ritmo de vida también provoca esto, hay trabajos en los que permiten que vayan a comer a su casa, pero cuando son obreros normalmente las empresas están a las afueras de la ciudad y ahora afortunadamente ya hay más comedores supervisados por nutriólogos, pero también hay comedores que no les permiten pagar el plato y entonces ellos llevan a comida un refresco, unas papas y sí influye mucho esta cuestión”.

La licenciada en Nutrición también detalló que los hombres tienen necesidades nutricionales diferentes de las mujeres, debido a que generalmente tienen un mayor tamaño, más masa muscular y un metabolismo más acelerado. “Normalmente los hombres son más altos y tienen más músculo, requieren más calorías, su requerimiento normalmente debe estar entre 2 mil y 2 mil 800 calorías, pero claro que esto depende mucho del peso y de la actividad física”.

Foto: Jaime Lagunas.

En ese sentido, enumeró que la población masculina debe buscar el consumo de plátanos, por su salta cantidad de potasio; frijoles, por la aportación de biotina; pescados como el salmón, por el omega 3; nueces de Brasil, que son considerados grasas saludables, así como un huevo por día, por la cantidad de proteína que aporta.

La alimentación de los varones debe estar más enfocada a lo que son los granos integrales, frutas, verduras y alimentos ricos en fibra que nos van a ayudar a controlar el hambre y a defendernos de ciertos tipos de cáncer, como de colon y de próstata, que son los que normalmente padecen los varones. También hay hombres que son muy amantes de la carne y sienten que si no comen carne no comieron. Entonces hay que cuidar la percepción de la cantidad de proteína que se debe consumir”, agregó Adriana Paredes.

En relación con la posibilidad de que los padres de familia que comienzan a tener una dieta más sana también puedan disfrutar de unos tacos o un antojito en el fin de semana, la especialista respondió que “sí lo puede hacer, aquí nada más es cuidar porciones. Podemos comer de todo, nada más sin exagerar. Puede ser una vez por semana, si me cuido, a lo mejor el domingo puedo hacer una comida libre y que sea lo que más me guste. No pasa nada, siempre y cuando te cuides en la semana. Ellos deben tener la conciencia de que estar comiendo sano, variado y suficiente es importante porque los va a mantener vitales para poder convivir con sus hijos y poder dar un buen ejemplo de vida”, finalizó.