Más viva que nunca la consigna que 'no se olvida' el 2 de octubre

La Voz de Michoacán. Las últimas noticias, hoy.

Foto: Eduardo Alonso. Consignas del movimiento del 68 siguen vigentes.

Juan Bustos, Tsuri Chávez / La Voz de Michoacán

Morelia, Michoacán. Las consignas del movimiento del 68 siguen vigentes y no deben quedarse sólo en un hecho lejano. Hoy, más que nunca, urge la necesidad de democratizar instituciones como la UMSNH alzar la voz ante las injusticas, señalaron estudiantes en la marcha conmemorativa de los hechos ocurridos hace 50 años en la Plaza de las Tres Culturas, en la Ciudad de México. La amenaza de lluvia no amilanó la intención de marchar este día desde Ciudad Universitaria hacia el Centro Histórico; sin embargo, a pesar del aniversario no hubo ningún elemento “novedoso” en la movilización que se hace cada año, incluso hubo menos sectores populares participando en Morelia.

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A las 16:30 horas, las columnas de estudiantes ya se formaban sobre la avenida Francisco J. Múgica, como es habitual, ordenados por los sorteos que realiza la Coordinadora de Universitarios en Lucha (CUL) y donde tradicionalmente es la Casa del Estudiante 2 de Octubre la que encabeza la movilización.

En entrevista, Luis Carlos Rodríguez, integrante de la Casa del Estudiante Nicolaita, expuso la necesidad de que no haya perdón ni olvido ante los hechos ocurridos el 2 de octubre, y por ello, como albergues estudiantiles, salen a movilizarse no sólo por la memoria, sino por las injusticas cotidianas. “Nosotros tenemos a los expulsados por la Universidad en una demanda legítima de ingreso ante un castigo excesivo”, justificó.

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Mientras avanzaba la movilización sobre la calle Cuautla, los jóvenes portaban también los rostros de los 43 estudiantes de la Normal Raúl Isidro Burgos, alternando la consigna de "2 de octubre no se olvida", seguía “Ayotzi vive, la lucha sigue”, y de esta manera se encadenaban quizá los hechos más simbólicos para el movimiento estudiantil. El vocero estudiantil expuso que la conmemoración, desde su óptica, debería servir para la reflexión, “me parece que desde las organizaciones hace falta una mayor articulación para hacer frente a las injusticias que no paran, inspirados por esa generación que pensó diferente”.

Los estudiantes se movilizaron hacia el Centro, y a pesar de la amenaza de lluvia avanzaron sobre la Avenida Madero, después de los albergues estudiantiles siguieron los estudiantes normalistas, para posteriormente marchar los estudiantes de la UNAM. Al final, organizaciones como Asambleas Estudiantiles de las facultades de Historia y Psicología de la UniversidadMichoacana, se integraros a la marcha.

Es importante señalar que la Asamblea Estudiantil de la Escuela Nacional de Estudios Superiores Unidad Morelia de la UNAM ayer paralizó las actividades en el marco del 50 aniversario de la matanza de Tlatelolco; sin embargo, rechazaron dar una postura como Asamblea ante el contexto de memoria de los hechos ocurridos en la Plaza de las Tres Culturas, así que hoy miércoles retoman sus actividades normales.

El recorrido de cada año no sufrió modificación, avanzaron después de Cuautla sobre la Avenida Madero con las consignas también de cada año, “2 de octubre no se olvida, es de lucha combativa”, “vestido de verde olivo, políticamente vivo; no has muerto camarada”.

 

Entre el contingente estudiantil también se encontraba el Frente Nacional en Lucha por el Socialismo con unmodesto grupo que reiteró la demanda de la aparición con vida de los detenidos desaparecidos de 1968 a la fecha y el castigo a los culpables. “Hasta hoy no hay detenidos por lo del 68, no hay culpables de eso, Echeverría está con vida y sin castigo, eso es una deuda con los cientos de asesinados esa tarde”, aseguró Luis Carlos Rodríguez. Aun con la lluvia encima y a pesar de lo que los carteles ya se les corría la tinta sobre sus cabezas, continuaron lamovilización hasta llegar al corazón de la ciudad.

“Somos nietos de la Revolución, hijos del 68 y hermanos de Ayotzinapa”, rezaba una de las consignas que encadenaba decenas de años de lucha y de demanda de justicia social. Ya en pleno aguacero, la movilización culminó con pocos activistas sobre la Avenida Madero.

Hablan morelianos

Sobre los hechos históricos, Camila Cruz, quien es estudiante de preparatoria, indicó que en su óptica, reconoce que el 2 de octubre de 1968 “el Ejército metió la mano en la manifestación de ese día con el pretexto de que un estudiante disparó un arma de fuego, lo cual terminó en una masacre injustificada que, según entiendo, fue minimizada por parte de los medios de aquel entonces”, relató.

Opinó que es admirable la solidaridad que hubo entre los jóvenes estudiantes de la época y de la gente que se les unió; sin embargo, reconoció que “es muy triste que la historia siempre termine de ese modo y peor aún, que todavía siga así”.

Por otro lado, Mónica Castañeda, profesionista dedicada al estudio de los negocios internacionales, indicó saber que fue un movimiento estudiantil donde el gobierno reprimió las acciones y hubo bastantes muertos, “creo que fue una acción negativa y que se siguen repitiendo estas matanzas donde nunca se encuentran a los culpables”, al referir al caso de los 43 normalistas de Ayotzinapa.

Finalmente, Araceli y Nayeli, dos estudiantes más de preparatoria abordadas, no tenían muy claro el suceso del 1968 en el país; sin embargo, externaron que tenían entendido que lamatanza del 2 de octubre de 1968 se trató de la muerte de algunos estudiantes en Tlatelolco, pero dijeron no saber mucho más. María Dolores Gómez, ciudadana que en el año de 1966 radicaba en el Centro Histórico, relató lo que a los 6 años pudo atestiguar la acción castrense que se desplegó para hacer frente a los estudiantes nicolaitas, dos años antes que en Tlatelolco.

“Mis recuerdos son muy lejanos, pero tal vez yo tengomás presente el 66 en Morelia; vivíamos en el Hotel Europa. Recuerdo que la avenida se cerró como si fuera día festivo, sólo que ahora venía el Ejército en sus caballos, los estudiantes corrían y a mí me metieron dentro del hotel, donde se hospedaban estudiantes. Mi mamá dejo meter a muchos más estudiantes para que por las azoteas se dispersaran a otros lugares, esto propició que los militares se metieran con todo y caballos”, recordó.