En Brasil, médicos negaron aborto a niña de 10 años abusada por su tío; tuvo que viajar a otro estado

Había la orden de un juez, pero los médicos se negaron argumentando que ya no era el tiempo de 22 semanas marcado por la ley: tenía 22 semanas y 4 días

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Redacción / La Voz de Michoacán

Brasil. Entre protestas y teniendo que viajar a otro estado del país, una niña brasileña fue sometida a la interrupción del embarazo.

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Inicialmente, un tribunal del estado brasileño de Espírito Santo ordenó la interrupción inmediata de la gestación de una niña de 10 años que quedó embarazada después de haber sido violada por uno de sus tíos, informó la prensa local.

El caso salió a la luz el 8 de agosto, luego de que la menor, acompañada de un familiar, fuera ingresada en un hospital del municipio de Sao Mateus con síntomas de embarazo. Allí, la menor denunció que había sido violada de forma reiterada desde que tenía 6 años por su tío, confesando que había callado todo este tiempo por temor a sus amenazas.

Las pruebas revelaron que la niña se encontraba en las 22 semanas y 4 días de gestación. En respuesta a una solicitud del Ministerio Público de Espírito Santo, un magistrado del Juzgado de Menores dictaminó el viernes pasado que "se realice el inmediato análisis médico para determinar el mejor procedimiento de viabilidad para la preservación de la vida de la niña", ya sea mediante "el aborto o interrupción del embarazo por medio de parto inmediato".

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La postura de los médicos

El 15 de agosto, la víctima fue internada en un hospital de la ciudad de Vitória, pero el personal médico se negó a realizarle el respectivo procedimiento, alegando que "la edad gestacional no está respaldada por la legislación vigente" que permite el aborto en el país.

Según el Código Penal brasileño de 1940, el aborto está permitido en tres casos: embarazo producto de una violación, que se puede interrumpir hasta la semana 22 de gestación; riesgo para la vida de la embarazada, y anencefalia del feto. Sin embargo, el fallo del juez se basó en una norma técnica para autorizar la interrupción del embarazo, editada en el 2005 por el Ministerio de Salud, que "permite realizar abortos de más de 20-22 semanas".

El "profundo sufrimiento" de la niña

Además, el magistrado tuvo en cuenta el deseo de la víctima de no proseguir con la gestación y concluyó que la voluntad de la niña es soberana. También señaló que la menor, cuando se menciona el embarazo, "entra en profundo sufrimiento, grita, llora y lo rechaza en todo momento, reafirmando su deseo de no querer" continuar con la gestación.

La niña tuvo que ser trasladada a otro estado brasileño para que se le realizara el aborto. Mientras, su tío se encuentra prófugo de la justicia y se le han imputado los delitos de amenazas y violación a menores de edad.

Finalmente recibió atención

La prensa local reportó que la niña de 10 años se encuentra fuera de peligro tras interrumpirle la gestación de 22 semanas y cuatro días en un hospital de Recife, la capital del estado de Pernambuco.

"Ella está bien. Por la mañana empezó a tener contracciones uterinas y esperamos terminar hoy todo el proceso", informó a Folha de S. Paulo el doctor Olímpio Moraes, del Centro Integrado de Salud Amaury de Medeiros.

En una nota, recogida por la prensa, la Secretaría de Salud de Pernambuco destacó que se llevaron a cabo "todos los parámetros legales".

Protesta frente al hospital

La niña ingresó el sábado en el hospital de Recife y al día siguiente un grupo religioso y contrario al aborto se manifestó frente al centro hospitalario, tras una publicación en las redes de Sara Giromini, una militante de extrema derecha, quien divulgó el nombre de la menor y el lugar donde se encontraba. El Estatuto del Menor y el Adolescente prohíbe publicar esas informaciones.

Los manifestantes quisieron impedir que el director del hospital accediese al centro e incluso intentaron entrar. Al mismo tiempo, un grupo de mujeres se congregó en el centro para defender el derecho de la menor a abortar.

El mismo domingo, la Justicia dio un plazo de 24 horas para que Google Brasil, Facebook y Twitter eliminasen las informaciones relacionadas con la menor.