PROYECTO SECRETO | Tiranos en gestación

Conviene examinar la salud mental de quienes aspiran al poder por el poder, perpetuándose eternamente. ¿Qué es realmente lo que busca, a qué aspiran, cuál es su bien deseado?

Mateo Calvillo paz

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El tirano no llega como tal, llega amable, falso, oculta sus intenciones perversas. Cuando triunfa se muestra cruel, implacable.

Tomamos al pueblo humilde, su dignidad, debemos ayudarle a recuperar su dignidad para que “no les ven la cara” ni los traten como tontitos.

¿Necesitamos educarnos para tener criterio y conocer sabiamente las personas? Sí.

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¿Todos los mexicanos son buenos? Evidentemente que no, en el mundo hay trigo y cizaña, como enseña el más grande de los maestros.

¿Todos los presidentes son buenos? No, ni todo lo que hacen es bueno, tienen luces y sombras, aunque algunos creen que todo lo que hacen es bueno y lo que hacen sus adversarios es malo, eso es maniqueísmo.

¿Son buenas las tiranías? ¡mil veces no! El dictador cubano Fidel Castro llegó en 1959. Todavía los cubanos tienen hambre de libertad y hambre de alimentos materiales. En reuniones internacionales he escuchado a muchos hermanos cubanos desnutridos y sombríos e inconformes con su régimen, cuentan las miserias de los cubanos.

Fidel Castro ya murió, pero su mala hierba sigue haciendo daño. Dejó una herencia perversa que siguió oprimiendo al pueblo, apenas en estos días su hermano Raúl dejó la dirección del Partido Comunista cubano.

Es necesario conocer oportunamente al tirano, cuando se anda acomodando para dar el zarpazo, cuando están en el tiempo del enamoramiento, de la seducción, de una increíble ternura para el “pueblo bueno”.

¿Cuál es el bien que buscan los tiranos, falsos profetas, con sus retóricas perversas y seductoras?

Conviene examinar la salud mental de quienes aspiran al poder por el poder, perpetuándose eternamente. ¿Qué es realmente lo que busca, a qué aspiran, cuál es su bien deseado?

Conviene tener bien presente su táctica para hacerse del poder: su poder de seducción, el tono encantador de serpientes. Retórica que halaga los oídos de los humildes, tono meloso y falsamente cariñoso, vestirse con la piel de oveja de buenas intenciones, de deseos de hacer felices al pueblo de humildes.

Es el vaho de los coyotes.

Cuando llegan al poder el cambio es brutal, radical y destapan su verdadera personalidad. Se convierten en la bestia del apocalipsis que quiere ser adorada, que aplasta que quiere reinar como Luzbel eternamente.

Es impresionante el vacío de sentimientos, la crueldad infinita, todo el fuego diabólico de Satanás. Históricamente hay tantos casos en que podemos leer esto: la dictadura de Venezuela (su jefe diabólico Nicolás Maduro es amigo de Andrés Manuel, tienen entre ellos miradas de dulzura.

Los resultados son diametralmente opuestos a las promesas, la decepción es total. Alberto Cao, (ignoro la ortografía), un joven cubano recorrió América Latina pregonando: “Castro nos traicionó”. Eran los primeros años después del triunfo de la revolución cubana.

LA LUZ DE LO ALTO

Siempre ha habido una elite de voraces que oprimen al pueblo. La lucha para redimir a los humildes y pobres viene de muy lejos, del fondo de la historia.

Ha habido muchos intentos de redención, de liberación de los oprimidos, derribando las tiranías para invertir la situación. Finalmente quieren cambiar de señor, trastornar la pirámide. En ese sentido ha habido quienes buscan derribar a los ricos neoliberales, en la línea histórica de quienes han buscado establecer la dictadura del proletariado. A veces no se piensa darles realmente el poder a los pobres porque sólo el caudillo está sobre todos, es el único bueno y capaz finge humildad y altruismo.

En el pueblo de Israel que, como régimen, era una teocracia, se busca de manera excepcional, radical, inédita, total el poder como una forma de servir a los pobres y humildes.

Es una monarquía diferente de las monarquías vecinas. “El rey, elegido por Yahveh… Será visto como hijo de Dios”. El presidente a veces da la impresión de que se la cree. Más importante es el texto que sigue “deberá por tanto hacerse defensor de los débiles y asegurar al pueblo la justicia” (Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia en el. 397).

No se necesita ser rey para asumir la defensa de los humildes, de las multitudes empobrecidas y postradas por falta de educación, indefensas, sin voz, víctimas de los vivales y poderosos que los siguen engañando y utilizando para subir al poder.

La búsqueda de una vida digna de los humildes avanza, se purifica y llega a su punto culminante en Jesucristo, el Hijo único de Dios que se hizo un ser humano, humilde, un esclavo. El es el primer pobre. “El hijo del hombre no tiene donde reclinar la cabeza”, afirmó. Lo condenaron a muerte contra toda justicia, nadie lo defendió. Murió como un criminal en la cruz, terminó en el más total despojo.

Quienes aspiran al poder para cambiar la suerte de los pobres deben seguir su ejemplo, entregarlo todo, hasta la vida como el Maestro Jesucristo y entonces les creeremos.