¿Qué le hace falta a José Antonio Meade?

La Voz de Michoacán. Las últimas noticias, hoy.

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Miguel Ángel Martínez Ruiz

 

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Con la intención de hacer un breve análisis de las circunstancias que rodean al señor Mead, en su calidad de candidato presidencial, se exponen algunos juicios relacionados con el tema expresado en el título del presente artículo. Se trata de  un hombre que ha recibido una educación muy completa, pues tiene en su haber las carreras de licenciado en Derecho por la UNAM, licenciado en Economía por el ITAM, y el doctorado también en Economía por la Universidad de Yale, EE. UU. de Norteamérica, por supuesto que también cursó la maestría en esta última disciplina. Debe mencionarse que un doctorado requiere que el aspirante elabore un trabajo de investigación, cuyo contenido sea un aporte al conocimiento universal. No es como una licenciatura que exige un trabajo de investigación documental.

Este estudioso de la economía ha sido también un destacado funcionario federal, con múltiples cargos de gran importancia, entre los que figuran cuatro secretarías de estado: Energía, Hacienda, Relaciones Exteriores, Desarrollo Social y nuevamente Hacienda. Dejó esta última dependencia para aceptar la candidatura presidencial. Esa trayectoria es verdaderamente sorprendente, sobre todo si se toma en consideración la gran cantidad de políticos de todos los partidos que se dedican a buscar posiciones dentro del aparato gubernamental. Nadie tiene tanta experiencia como Mead para ocupar la presidencia de México, porque conoce los problemas del país en la realidad, ya que el haber dirigido estas secretarías lo colocó en una posición privilegiada para estar en contacto directo con la problemática del país en aspectos como petróleos, electricidad, manejo de presupuestos y planes de gobierno, política exterior mexicana, desarrollo económico y nuevamente la administración financiera de la nación. Sería la persona idónea para ocupar la presidencia, pero ¿qué le sucede? ¿Por qué se ubica en el tercer lugar después de los otros dos candidatos? En primer lugar, trae el lastre propio del gobierno actual, cuyas deficiencias se las achacan indebidamente a él. En segundo término, el Partido Revolucionario Institucional ejerce un control absoluto sobre él y le impuso jefe de campaña, coordinadores, asesores, etc.

Un tercer aspecto tiene que ver con sus características personales,  como sus apellidos, aun cuando él forma parte de una tercera o cuarta generación de mexicanos por nacimiento, no tienen la aceptación del público, pero también influyen sus actitudes, las cuales corresponden a un académico, no a un político tradicional, de los que hablan y hablan, aunque no digan nada de importancia, pero muchas veces estos políticos aplican una oratoria efectista, al estilo de otros que han estado  al frente del Poder Ejecutivo Federal.

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Cuando el señor Mead trasmite sus mensajes no llegan a la ciudadanía, debido a su temperamento poco emotivo, pues da la impresión de un catedrático que expone una clase dentro de un aula universitaria. ¿Qué debe hacer frente a los otros dos candidatos que son “chuchas cuereras”, como suele decirse en el argot político, en eso de andar atrás de los cargos públicos? Tiene que aprender a ser candidato, es decir, a dirigir sus frases con naturalidad, pero siendo enérgico, categórico y claro. Una persona comentó hace algunos días: “Parece como que le falta alma”. Recuérdese que esta palabra procede del latín anima, vocablo que, según algunos autores, evolucionó así: anima, dio lugar a  anima, y esta a anma, la cual al pasar al español quedó en alma.  Sin embargo, hay que hacer una diferenciación: “animus designa al carácter, al valor, a la fuerza y resistencia de espíritu y al coraje, y al espíritu sustentador de las actividades intelectuales; en cambio, anima se vincula específicamente a la parte del espíritu relacionado con lo pasional, los sentimientos y las capacidades sensitivas.” Nótese que decimos "tener mucho ánimo", para significar que se poseeenergía, vigor, deseos, vehemencia, etc. Lo mismo ocurre cuando al manifestar: “me volvió el alma al cuerpo”, es decir, el ánimo, además se usa el verbo reanimar, al proporcionar ayuda a una persona que se ha desvanecido, pues significa recuperar la conciencia, el ánimo por la vida.

Un buen candidato debe saber hablar en público, sin importar quela oratoria haya evolucionado, estadesempeña un papel esencial a la hora de causar una buena impresión en los oyentes, que son los potenciales votantes.

¿Qué debe hacer el señor Meade si quiere ganar en las próximas elecciones?  Buscar una persona que sepa cómo habla un orador político, para convencer y mover a las personas para que actúen en determinado sentido; esto se logra mediante un buen discurso,  el cual debe transmitir razonamientos lógicos y bien expresados, con la fuerza de que lo que se está externando; debe ser resultado más que de razonamientos fríos, de convicciones firmes, deseos sinceros, buena fe y disposición a servir como titular de la presidencia. También debe valorarse que los votantes no razonan a la hora de emitir su voto, influyen sobre ellos factores emocionales. Puede más la emoción que la razón. Se ha comprobado que los mensajes que llegan al inconsciente determinan en un alto porcentaje nuestras decisiones.

Para lograr el triunfo en los próximos comicios resulta indispensable deslindarse del actual gobierno, asumir una postura crítica, sin caer en la vulgaridad, sino con argumentos inteligentes que reflejen sentimientos de solidaridad con las aspiraciones y causas populares. Esto es una visión diferente de la realidad socioeconómica.

El posicionamiento del candidato Mead tendrá que mejorar cuando se lleven a cabo los debates, ya que sus oponentes carecen de los elementos intelectuales y dialécticos, que él sí posee, para demostrar que pueden afrontar los problemas con talento y vastos conocimientos sobre los diferentes temas de la agenda nacional.

La verdad es que José Antonio Mead Kuribreña es un candidato que tiene todas las ventajas a su favor. El más alto grado académico, dos carreras (derecho y economía) que son esenciales para gobernar, una trayectoria que ningún presidente de México ha tenido antes de llegar a la primera magistratura de la nación, honestidad a toda prueba, tanto que él mismo los ha retado a que le busquen cualquier conducta indebida. Además su capacidad intelectual está muy por encima de la  de sus adversarios. Ellos, lo más que han logrado es una licenciatura y ya. Nunca se han preocupado por continuar su formación educativa. México necesita un presidente preparado, serio, que haya demostrado ampliamente su eficiencia y honradez al frente de las dependencias a su cargo. En lo político, los dos contendientes a  lo más que han llegado es a una jefatura de gobierno, uno; y a la dirigencia de un partido político el otro. No tienen ninguna otra experiencia significativa.

El señor Meade tiene que decir frases como las que a continuación se incluyen: No puede haber instituciones buenas con hombres perversos y vulgares ladrones que no son más que aventureros de la política que aspiran a gobernar para beneficio personal y de algún grupo de incondicionales.Quienes roban el dinero del pueblo, destinado para hospitales, escuelas, vías de comunicación y otras obras de beneficio social no solo  engañan al pueblo, sino que traicionan a la patria. No más Duartes ni Yarrington, ni Padrés en el poder público. Se les debe castigar con toda energía, pues nadie tiene fueros contra México. Lucharemos contra la corrupción y la impunidad, sin temblor en las manos a la hora de aplicar la ley. Nada de perdonar a los delincuentes, pues si se procede así el país caerá en un desorden por encima de la capacidad del gobierno para mantener el estado de derecho.|| Debemos desterrar para siempre la demagogia, tan dañina como el opio y sus derivados, porque también perjudica al engañar al pueblo de México con promesas que se les olvidan el mismo día que llegan a los puestos públicos. Para mí la política tiene un solo sentido: el de gobernar bien. || Yo soy economista, motivo por el que serán mi prioridad las necesidades económicas del pueblo. Conozco las carencias en las que transcurre la vida de millones de mexicanos, lo cual me parece una grave contradicción, pues tenemos un país sumamente rico. Es tiempo de aprovechar correcta y racionalmente nuestros recursos naturales, pero en bien de todos, pues no sería justo que unos cuantos resultaran los beneficiarios. Pero esta realidad no se va a transformar de la noche a la mañana, porque la etapa que atraviesa México reclama mayor esfuerzo y redoblados ánimos en las tareas constructivas. Debemos continuar la trayectoria ascendente del país, nade podrá cambiarnos de esta ruta, nuestra pasión por México no cambiará jamás.|| Como mexicano, pienso en nuestra independencia económica, en la afirmación plena de nuestra personalidad nacional por encima de todo, en la autosuficiencia alimentaria, que nunca falte comida nutritiva en los hogares de nuestra patria, pues el diario sustento de las personas no puede esperar para mañana, es hoy cuando debemos resolver este problema. Me ha conmovido ver a las amas de casa en los mercados donde quisieran comprar mejores productos para sus hijos, pero el dinero que llevan en sus monederos no les alcanza. Por eso debemos dedicar toda nuestra fuerza a resolver los problemas económicos del pueblo. Esa es mi meta principal y la voy a cumplir cabalmente, pues llegar a la presidencia de México no es solamente un gran honor, sino una gran responsabilidad que se debe desempeñar con patriotismo, con auténtico amor a México, porque el amor a México no debe ser solo una frase, debe ser acción y trabajo para mejorar nuestras condiciones de vida. || Ya lo decía el gran prohombre Melchor Ocampo, “es hablando, no matándonos como habremos de entendernos”, México tendrá que seguir por el camino de la pacificación, pues solo  de esta manera será posible alcanzar nuestras metas de mejoramiento en todos los aspectos de la vida nacional. Es necesario que los jóvenes tengan oportunidades laborales, en lugar de ingresar a las bandas de la delincuencia, lo  mismo las mujeres y los hombres de México en edad productiva, deberán tener una forma honesta de vida que les permita satisfacer sus necesidades y las de sus familias. Ya lo he dicho y lo  repito: mi máxima aspiración es constituir un gobierno que atienda las necesidades económicas del pueblo: mejor alimentación, viviendas, escuelas, hospitales, agua potable, alcantarillado, electrificación, en fin, desarrollo para todos sin distinción de ninguna clase.||Yo no soy ningún mesías, soy un hombre común y corriente como cualquiera de ustedes, los mexicanos que están aquí. Nadie puede sentirse elegido presidente sin haber antes recibido el apoyo del pueblo. La sencillez es una de mis características. Estoy muy lejos de la feria de las vanidades, detesto la jactancia y el optimismo sin fundamento; solo confío en la capacidad de nuestra gente para superar los problemas que nos afectan. los mexicanos somos un pueblo trabajador y  honrado, la mejor demostración se encuentra en nuestros hermanos que van a los Estados Unidos y han demostrado y siguen demostrando con hechos que son los que más trabajan. Algunos de ellos tienen jornadas diarias hasta de veinte horas, lo que no hace nadie, ellos sí pueden hacerlo. Debemos seguir ese gran ejemplo. ||No debemos vivir de esperanzas, sino de realidades concretas, progreso efectivo que llegue a los bolsillos de todos los habitantes de esta tierra prodigiosa. ¿Esperanza de qué? Hay que tener confianza en nuestra fuerza de trabajo, en la gran capacidad de los mexicanos para construir desde ahora una patria mejor, un México más justo y equitativo, donde las riquezas materiales y espirituales nos beneficien a todos por igual.|| A través de mi vida he aprendido que solo el trabajo nos puede conducir al progreso, pero yo no voy a experimentar como otros que van a ver si les sale bien… yo emprenderé acciones exitosas, con base en mi experiencia que mis oponentes no la tienen. Sin alarde ni jactancia de ninguna especie puedo decir que ninguno de ellos ha tenido las oportunidades de servir a México en cargos de altísima responsabilidad como las he tenido yo, pero esas oportunidades han significado también desvelos personales, trabajo de día y a veces de noche, porque en nuestro país no hay lugar para aquellos que solo piensan en su beneficio. Para mí, México es mi prioridad, y resolver los problemas de los mexicanos será mi gran compromiso. || La política es entrega, trabajo, dedicación y esfuerzo para resolver los problemas en forma correcta. Quien no lo entienda así  está en un error. Por eso yo no espero soluciones mágicas, ni sueños imposibles. Mi experiencia me ha enseñado que solo enfrentando la realidad  por dura y difícil que esta sea se pueden lograr avances en todos los órdenes de la vida de nuestro pueblo.