Por investigar irregularidades en el Ayuntamiento, contralor de Acapulco es despedido

El exfuncionario había notificado a funcionarios del gobierno de Adela Román las presuntas irregularidades, como desvío de recursos, 300 “aviadores” en la nómina y una abultada lista empleados de los regidores

Redacción / La Voz de Michoacán

Acapulco, Guerrero. El contralor municipal de Acapulco, Francisco Torres Valdez, fue destituido del cargo y acusó que fue despedido por haber realizado auditorías internas en distintas áreas del Ayuntamiento, donde detectó diversas irregularidades administrativas.

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Torres Valdez había notificado a funcionarios del gobierno de Adela Román las presuntas irregularidades, tales como desvío de recursos, la presencia de al menos 300 “aviadores” en la nómina y una abultada lista empleados de los regidores.

"Se trata de un complot que encabezan Ernesto Manzano y Víctor Román Román, quien en realidad manda en el Ayuntamiento, así como el secretario particular Edmundo García y todos los regidores de la comuna", dijo.

El ahora excontralor acusó de su destitución al secretario general del Ayuntamiento porteño, Ernesto Manzano Rodríguez, sobre quien pesa una auditoría por el presunto desvío de 11 millones de pesos.

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"Tenemos un informe de las auditorías donde se establece un daño a la Hacienda Pública municipal cometido por Ernesto Manzano, secretario general del Ayuntamiento, por el manejo de las pipas de agua", señaló Torres Valdez.

También mencionó que el funcionario le pidió hacer "contratos hechizos" y, debido a que se negó a comprobar los once millones de pesos, orquestó el despido junto con los regidores de la comuna porteña, además de impedirle con policías el paso hacia las oficinas.

"Hubo una donación, por más de 2 millones 700 mil pesos, al Ayuntamiento de Acapulco por parte de Pemex, y resulta que ese combustible lo recibían las gasolineras. Mis auditores descubrieron que metieron facturas para cobrar ese combustible que era donado para los vehículos de la comuna porteña", reveló el excontralor de Acapulco.

Además, acusó que el asesor de seguridad de la Secretaría de Seguridad Pública, Jondalar Castillo Ledezma, tenía una nómina con más de 300 personas que cobran sin trabajar.

"Los 300 aviadores cobran más de cinco mil pesos y le entregaban, cada uno, tres mil pesos quincenales a Jondalar Castillo, lo que representa 900 mil pesos mensuales", aseguró.

Asimismo, en el caso de los regidores, destacó al priista Luis Miguel Terrazas, quien tendría 45 empleados a su cargo.