México e Israel: Dos escenas de irresponsabilidad colectiva en plena pandemia de coronavirus

Ciudadanos de ambos países ignoraron la sana distancia en medio de la pandemia: en México, aficionados van partido de béisbol, y en Israel, religiosos acuden a funeral masivo

Redacción / La Voz de Michoacán

Morelia, Michoacán. A pesar de que el mundo está siendo azotado por la pandemia de COVID-19, la cual ya ha cobrado más de dos millones de vidas a nivel mundial, muchas personas aún se rehúsan a creer en la existencia del SARS-CoV-2, a mantener la sana distancia, permanecer en casa o usar cubrebocas.

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Hace apenas un día, el mundo fue testigo de la irresponsabilidad de las personas en dos rincones del mundo: Israel y México. Aunque los dos sucesos fueron muy diferentes, en ambos se pudieron observar a miles de personas que no respetaban la sana distancia, por si fuera poco, muchos de ellos no portaban un cubrebocas o lo portaban de forma incorrecta. Aquí te explicamos qué paso en ambos países.

Judíos en Israel

El pasado 31 de enero falleció el rabino Meshulam Dovid Soloveitchik, uno de los líderes religiosos más importantes de aquel país, a los 99 años de edad por complicaciones causadas por la COVID-19. Después de que se confirmara la muerte del rabino, miles de judíos ultraortodoxos asistieron a su funeral en Jerusalén e inundaron las calles de la ciudad, todo mientras la mayoría no portaba cubrebocas y a pesar de que Israel impuso un confinamiento desde hace más de un mes.

De acuerdo con medios internacionales, el funeral masivo se llevó a cabo en el oeste de la ciudad, en donde se podía observar a miles de jóvenes ultraortodoxos sin mascarilla mientras rodeaban al vehículo que trasladaba el cuerpo del rabino Meshulam Dovid Soloveitchik. Posteriormente, los asistentes se dirigieron al cementerio de Har Hamenujot, en donde fue enterrado el famoso rabino.

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Esta violación al confinamiento impuesto por el gobierno israelí es el más reciente en una larga lista de violaciones por parte de la comunidad ultraortodoxa en aquel país, que además tiene el índice de morbilidad más alto del país y que en las últimas semanas ha protagonizado múltiples enfrentamientos con la policía, tras negarse a acatar las normas del confinamiento.

Actualmente, la normativa impone el cierre del sistema educativo, que no han respetado muchas escuelas ultraortodoxas, y de toda actividad laboral no esencial, además de una limitación al movimiento a no más de un kilómetro del domicilio y un máximo de cinco personas en reuniones en interior y 10 en exterior, entre otras.

El confinamiento entró en vigor a finales de diciembre y llegaba a su fin el 31 de enero, sin embargo, se espera que el gobierno israelí extienda el confinamiento.

De acuerdo con el portal The Times of Israel, la policía calcula que alrededor de 10 mil judíos ultraortodoxos asistieron al funeral, por lo que se espera una alza en los contagios en aquel país.

El subsecretario de Salud, Yoav Kisch, criticó a los asistentes y la actuación de la policía en un mensaje publicado en Twitter.

Mientras que el Ministro de Defensa dijo lo siguiente:

“Así es como se ve la aplicación desigual: millones de familias y niños están encerrados en sus hogares y acatan las reglas, mientras miles de personas ultraortodoxas asisten al funeral, la mayoría de ellos incluso sin cubrebocas. (…) Los días de la indulgencia se acabaron.”

Benny Gantz.

Cabe señalar que a diferencia de otros países, Israel ya ha vacunado a tres millones de ciudadanos con la primera dosis contra la COVID-19, mientras que otros dos millones ya han recibido la segunda dosis, lo cual podría ayudar a desacelerar la pandemia en aquel país.

Pero México no se queda atrás

Mientras en Israel miles de personas ignoraban las recomendaciones para evitar la propagación del virus del SARS-CoV-2 al asistir a un funeral, en México, miles de personas asistieron a la Serie del Caribe, la cual se llevará a cabo del 31 de enero al 6 de febrero, en Mazatlán, Sinaloa.

A pesar de la pandemia de Covid-19, miles de aficionados al béisbol se dieron cita en el estadio Teodoro Mariscal para apoyar a su equipo favorito.

Actualmente, el estado de Sinaloa se encuentra en semáforo naranja, por lo que se autorizó el ingreso de público a estadio.

La capacidad máxima permitida tenía que ser del 45 por ciento, es decir, una cifra cercana a los 7 mil aficionados, aunque imágenes compartidas en redes sociales muestran varias aglomeraciones al interior del estadio Teodoro Mariscal.

Además de la presencia de miles de aficionados, el gobernador Quirino Ordaz también estuvo presente.