Se creía extinto, pero este topo dorado acaba de ser grabado y fotografiado después de 80 años: la clave es buscar su ADN

Encontrar a estos topos dorados, animales endémicos de África subsahariana, fue una tarea complicada, pues son una especia altamente elusiva.

Agencias / La Voz de Michoacán

Una brillante especie de topo dorado fue redescubierta en las dunas de Sudáfrica tras un extenso trabajo para localizar a este animal, pues la última vez que se le vio fue en las costas de Sudáfrica en 1937. Tuvieron que pasar 80 años para que una nueva técnica de búsqueda tuviera las herramientas necesarias para dar con el escurridizo topo dorado de Winton (Cryptochloris wintoni).

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Los investigadores lograron dar con este topo tras recopilar más de 100 muestras de suelo en diversos lugares y analizarlas para obtener rastros de ADN. A este tipo de muestreo se le conoce como eDNA o ADN ambiental.

Una especie escurridiza

Este tipo de aproximación era más comúnmente utilizada para la detección de organismos acuáticos, pero el reciente estudio tuvo éxito en la búsqueda de animales terrestres, como cuatro especies distintas de topo dorado, incluyendo la de Winton. Dicha especie está catalogada como de peligro crítico y se creía extinta, hasta ahora.

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Encontrar a estos topos dorados, animales endémicos de África subsahariana, fue una tarea complicada, pues son una especia altamente elusiva. Además, de las 21 especies que existen, diez están catalogadas como amenazadas en la "Lista Roja" de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). Los topos dorados de Winton, tal como sus especies hermanas, son insectívoros subterráneos que dependen de suelo blando para excavar, moverse y crear sus madrigueras.

Sin embargo, la minería y la urbanización han dificultado el esparcimiento de topos dorados, siendo la extracción de diamantes aluviales una de las principales causantes de su desplazamiento y aparente extinción. Es por ello que realizar este tipo de estudios es importante no solo para la localización de especies, sino para obtener información acerca de su distribución, abundancia y taxonomía, de tal manera que así se llenen los vacíos de conocimientos para crear estrategias efectivas de conservación de

Además, de las cuatro especies localizadas con el estudio de eDNA, dos de las registradas son especies que se creen abundantes en la región. Pese a ello, gracias a la elusividad de estos animales, se conoce poco sobre ellas, sumado a las complicaciones antes mencionadas con el estudio de la vida subterránea de estos topos.

Optimismo y la necesidad de mejorar

Ya le hemos fallado a muchas especies, es nuestra oportunidad de no fallarle al topo dorado.

Cobus Theron, director del Programa de Conservación Zonas Áridas en Endangered Wildlife Trust de Sudáfrica, era optimista respecto a encontrarse nuevamente con los topos dorados de Winton. Según lo reportado por Live Science, Theron creía que solo hacía falta un equipo dispuesto a hacerlo y el método de búsqueda correcto.

"Aunque mucha gente dudaba de que el topo dorado de De Winton todavía estuviera ahí fuera, yo tenía buena fe en que la especie aún no se había extinguido. Estaba convencido de que bastaría con el método de detección correcto, el momento adecuado y un equipo apasionado por encontrarlo."

El redescubrimiento del topo dorado de Winton es un gran logro para la conservación de especies elusivas. Sobre todo gracias al éxito de un enfoque comúnmente utilizado para animales acuáticas, que ha probado ser efectivo para organismos terrestres. Además, pone hincapié en la necesidad de recopilar más información de las diversas especies del mundo para poder crear planes de conservación eficaces, y todo eso sin olvidar que somos nosotros, los humanos, quienes actualmente regimos el ritmo de extinción. Necesitamos actuar mejor.