No es recomendable despertar a un sonámbulo: ¿mito o realidad?

Lo primero que se debe aclarar es que esta condición no es un invento, es una parasomnia, se asocia a alguna alteración en el comportamiento durante el sueño.

Foto: Tomada de Internet.

Agencias / La Voz de Michoacán

El sonambulismo ocurre con mayor frecuencia en niños de entre 5 a 12 años, si bien puede producirse en personas de cualquier edad. Si se despierta a una de estas personas, lo más probable es que su expresión sea de desconcierto o desorientación, aunque a veces la persona sonámbula pueda mostrar una brusquedad que induzca a pensar, erróneamente, en un comportamiento agresivo. Incluso puede ser beneficioso despertarla, puesto que pueden lesionarse si tropiezan y pierden el equilibrio.

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 ¿Cómo actúa un sonámbulo? 

  • Salir de la cama y caminar 
  • Sentarse en la cama y abrir los ojos 
  • Tener una mirada perdida, con ojos vidriosos 
  • No responder ni comunicarse con otras personas 
  • Tener dificultad para despertarse durante un episodio 
  • Estar desorientada o confundida por un breve período después de ser despertada 
  • No recordar el episodio por la mañana 
  • Tener problemas para cumplir con tus tareas durante el día debido a las alteraciones del sueño 
  • Tener terrores nocturnos además de sonambulismo 

Lo primero que se debe aclarar es que esta condición no es un invento, es una parasomnia, se asocia a alguna alteración en el comportamiento durante el sueño. 

Despertar a los sonámbulos no es peligroso, a estas personas se les puede despertar, aunque no de forma abrupta ya que les causará desorientación.

 Hay una creencia que si se golpean durante un lapso de sonambulismo, la persona no se hace ningún daño, pero no; si se cae o sufre una contusión el cuerpo resentirá lo mismo que si se lo hubiera hecho despierto.  

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Normalmente, el sonámbulo no recuerda en la mañana nada de lo que hizo mientras dormía. 

Estas personas son capaces de realizar conductas de diferente complejidad mientras está dormido como andar, gesticular, sentarse en la cama, hablar palabras inconexas. 

Los ojos permanecen abiertos durante el episodio, aunque el individuo no ve nada, y simplemente hace uso del recuerdo de las características del entorno para llevar a cabo sus acciones. 

Aunque no es prudente encerrarlos, porque se desencadenan otros riesgos, es importante limitarles la deambulación durante el episodio de sonambulismo.