Fitch advierte deterioro de banca mexicana y contracción del 7,7% en seguros

Fitch encontró que el 67 % de aquellos con calificaciones internacionales tienen perspectiva negativa

Foto: Twitter.

EFE / La Voz de Michoacán

La agencia Fitch Ratings advirtió este martes sobre el "deterioro" del entorno operativo de la banca mexicana y una posible contracción de entre el 5,2% y el 7,7% del sector de seguros por la crisis de la COVID-19.

PUBLICIDAD

Tras analizar los registros regulatorios de 51 bancos mexicanos, Fitch encontró que el 67% de aquellos con calificaciones internacionales tienen perspectiva negativa, mientras que el 33% de estas entidades calificadas en escala nacional tienen perspectiva u observación negativa.

Las perspectivas y observaciones están impulsadas principalmente por el deterioro del entorno operativo y la crisis del coronavirus. Fitch espera que la calidad de activos y utilidades se deterioren en el segundo semestre de 2020 y el año 2021", comentó la agencia en un reporte.

La calificadora argumentó que la "respuesta fiscal limitada" del Gobierno de México para apoyar a consumidores y a empresas ante la crisis del nuevo coronavirus "seguirá afectando la capacidad de pago de los acreditados".

PUBLICIDAD

Además de casi 855.000 contagios y más de 86.000 muertos, la crisis de la covid-19 ha dejado una contracción anual histórica del 18,7% del PIB en el segundo trimestre y la desaparición de casi 1 millón de empleos formales.

Aun así, el paquete económico de México para aligerar la crisis equivale a sólo 1,1% del PIB, por debajo del promedio regional de 3,2%, según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).

Las calificaciones de los bancos podrían verse presionadas en el corto o mediano plazo, a medida que se materialice el impacto de la pandemia en la calidad de activos y rentabilidad", señaló el informe de Fitch.

La agencia pronosticó que las tasas de morosidad de los bancos alcanzarán su punto máximo en la segunda mitad de 2020 y en 2021.

Asimismo, reportó que el crédito al consumo disminuyó un 3,2% durante los últimos seis meses.