A pesar de lo que pensábamos o, al menos queríamos pensar, la pandemia de Covid-19 sigue entre nosotros y todavía no hay un horizonte claro para saber cuándo terminará. Más allá de las penosas consecuencias sanitarias que esta enfermedad tiene en México y en el resto del mundo, las secuelas se extienden a otras áreas de la vida, especialmente dentro del campo de las finanzas. En este artículo nos centraremos en algunas alternativas que pueden servirte para cambiar el rumbo de tus finanzas personales. Si bien todos los días leemos noticias acerca de cómo avanzan los planes de vacunación contra el Coronavirus, la salida de la pandemia lleva más tiempo que el deseado y eso empieza a verse en distintos planos, pasando por lo político, económico y social, además de las penosas consecuencias a nivel salud que está dejando el paso de esta enfermedad. De esta manera, el mundo se sigue reconfigurando y adaptando a un escenario que no figuraba en los planes de nadie hace apenas 18 meses, dando pie a uno de los momentos más excepcionales de la historia moderna. En ese sentido, son muchas las áreas que han debido reinventarse desde el arribo del Covid-19. Podemos pensar en el turismo, una de las industrias más golpeadas por todo lo ocurrido, ya que las limitaciones para viajar de un territorio a otro impactaron en el corazón de uno de los sectores más pujantes de la economía del siglo XXI. Si bien muchos países han establecido medidas para reactivar los viajes, sobre todo en el caso del turismo interno, especialistas aseguran que llevará años poder volver a poner en pie una estructura similar a la que hemos conocido. Lo mismo sucede en otros planos, en donde los plazos de recuperación no están del todo claros. Sin embargo, hay otras esferas que pueden estar haciendo gala del viejo proverbio oriental que sostiene que detrás de toda gran crisis hay también una gran oportunidad. El sector financiero, sin ir más lejos, vive un gran momento, en donde pequeños y medianos ahorristas deciden lanzarse al mercado aprovechando todas las herramientas que tienen a su disposición dentro del mundo online, como pueden ser una guía de criptomonedas detallada y completa, aplicaciones pare invertir en todo tiempo y lugar y una gran cantidad de información para fortalecer nuestra educación financiera. En ese sentido, si se analizan los resultados de diversas encuestas y estadísticas, podremos encontrar que tanto en México como en resto del mundo hallaremos que son los más jóvenes los que impulsan esta revitalización del ámbito financiero a pesar del contexto de crisis. Así, la edad de ingreso a los mercados es mucho menor que la de sus antepasados, intentando hallar la independencia financiera o la cantidad de ingresos necesarios para cumplir diferentes tipos de metas personales, que van desde viajar a tener una casa propia. Foto: Bermix Studio, Unsplash Un claro ejemplo de este fenómeno lo podemos encontrar en el boom de las criptomonedas que se encuentra tanto a nivel local, regional e internacional. Este activo digital nacido de manera 100% digital ha llegado para cambiar la cabeza de distintos grupos inversores, desde los más tradicionales a los más jóvenes. Desde 2009, año de nacimiento de Bitcoin, la criptomoneda más popular de todas, la idea de invertir en un bien intangible dejó de ser algo completamente descabellado a ser una realidad para cada vez más y más personas en todo el mundo. Luego de un 2020 de ensueño para estos activos digitales, el 2021 se ha presentado de manera un tanto irregular e impredecible para este instrumento. Los primeros cuatro meses habían confirmado la tendencia alcista de Bitcoin, así como también de otras menos conocidas como Ethereum o la sorprendente Rippio, pero mayo es considerado un mes negro para diversos analistas del sector, ya que han sufrido una depreciación mucho más fuerte de lo que se podía prever en el siempre oscilante mundo de las criptomonedas. Para encontrar las razones de este fenómeno, tendremos que bucear en terrenos políticos más que estrictamente financieros. Tras el anuncio autoridades políticas como las de China, que marcaron los riesgos de invertir en este tipo de instrumento, los precios cayeron de forma estrepitosa. Lo mismo sucedió con economías de menor tamaño, las cuales también advirtieron la cantidad de fraudes que pueden deparar las criptomonedas. Sin embargo, muchos expertos en finanzas y tecnologías no se dejan llevar por el pánico y advierten que este contra movimiento era previsible de alguna manera y que si se revisa la historia reciente, siempre ha habido fuertes bajas luego de alzas tan pronunciadas. Si se sigue la curva histórica, no es descabellado pensar un pronto y sólido recupero del valor de las principales divisas digitales. No todo son criptomonedas: otras alternativas a tener en cuenta Más allá del furor de las criptomonedas, que sigue en pie a pesar de estas semanas adversas, los más jóvenes también cuentan a su disposición con diversas alternativas que les pueden ser más que útiles para generar rendimientos extras sin necesidad de realizar ningún movimiento exagerado y aprovechando para sí todo lo que tienen las nuevas tecnologías para ofrecer en pleno siglo XXI. Así, la idea de invertir en todo tiempo y lugar ya dejó de ser una fantasía futurista para convertirse en una realidad. Comencemos con una alternativa conocida por todos: las acciones en la bolsa. Desde hace años que la presencia de medianos y pequeños inversiones en este campo va en franco aumento, potenciado por el gran número de recursos Fintech que se encuentran disponibles en el mercado. Lo que antes parecía destinado para agentes especializados que solo veíamos en las películas, ahora está a nuestro alcance en el tamaño de una app similar a la que utilizamos para pedir comida o incluso intentar conseguir una cita para el fin de semana. En épocas de mayor volatilidad como la que vivimos, la bolsa de valores puede presentar oportunidades únicas. Algo similar ocurre con las opciones binarias, una de las alternativas más valoradas también por los más jóvenes. Este método de inversión logra sacar provecho de la volatilidad al igual que las acciones, ya que se basa en poder predecir el comportamiento de un activo financiero en un determinado lapso de tiempo, algo que resulta bastante complejo en tiempos de crisis en los que vivimos y en este planeta globalizado e hiperdigitalizado, en donde un anuncio en Japón puede cambiar en segundos lo que sucede en otro continente. Para ello, entonces, estar al tanto de todo lo que ocurre en las noticias resulta vital. Por último, y si llegado a este punto no te has convencido de invertir de manera digital para ganarle terreno a la pandemia, siempre podemos recomendarte invertir en propiedades. En tiempos de economías magras, los precios de las propiedades suelen ser los primeros en bajar, pero también los primeros en subir cuando comienzan a aparecer los primeros signos de reactivación financiera. Este método tradicional nunca envejece y es de los más elegidos por aquellos que buscan beneficios altos sin necesidad de correr grandes riesgos, apostando a un plazo de tiempo más alto para las ganancias.
La Voz de Michoacán
