"COVID-19 nos obliga a aprender cómo convivir, colaborar y saber el espacio de cada quien"

La especialista Cecilia Izarraraz señaló que la contingencia también debe deenseñarnos a cómo convivir, cómo colaborar y el respeto al espacio personal en el hogar.

Foto: Christian Hernández / Diseño: La Voz de Michoacán.

La Voz de Michoacán ha hecho un ejercicio que te acercará a los especialistas, quienes hablarán sobre este tema, y los efectos colaterales que debes tomar en cuenta en estos tiempos de convulsión, producto de la contingencia sanitaria.

NONAGÉSIMA PRIMERA PARTE DE UNA SERIE

PUBLICIDAD

Jorge Manzo / La Voz de Michoacán

Morelia, Michoacán. En medio de esta contingencia sanitaria, no se trata de terminar un programa de conocimientos, sino de reconocer que en esta condición son otras las cosas que se deben aprender, por ejemplo, cómo convivir, cómo colaborar, y también a identificar el espacio de cada quien aun en un espacio pequeño que es el de casa y que el maestro reconozca que el padre no es el responsable de cubrir un programa educativo, expuso la doctora en educación, Cecilia Izarraraz Gutiérrez.

La especialista afirmó que el hecho de que ahora le den clases por internet a los niños, no significa que sea educación virtual, pues ésta es formar a los estudiantes de diferentes niveles para que puedan construir procesos de autoaprendizaje, para que puedan aprender no necesariamente lo del libro sino aprender a vivir y aprender a una nueva convivencia. “Esto es vital, los niños ahora están aprendiendo el manejo de muchas herramientas, algunas ya las usaban, el WhatsApp, el correo electrónico”.

PUBLICIDAD
DA CLIC AQUÍ PARA VER TODAS LAS ENTREVISTAS

Izarraraz, con amplia trayectoria, reiteró que lo más importante en estos momentos es reconocer que tienen que construir una nueva convivencia, en la que el manejo de esas herramientas les permita también aprender a relacionarse de una manera más rica, más fluida con este entorno obligado, que los aleja de sus amigos en este momento de su vida, pero que se ponen enfrente nuevas tareas y retos tanto para los docentes como para los padres de familia y evidentemente para los alumnos.

Para un maestro reconocer la dimensión de la tarea que está dejando para la casa, en donde no se tiene un docente auxiliar, sino un padre de familia que tiene que trabajar, y atender diferentes cosas para poder continuar, pero que asumen la responsabilidad de acompañamiento, mientras que la parte de padre de familia, el de reconocer que su hijo puede aprender en casa en este momento una forma diferente de convivencia, una forma en la que el respeto se puedan reconocer los espacios de cada quien y en casa el manejo de las herramientas”.

La doctora reconoció que en estos tiempos los chicos manejan muchas veces los medios con mayor fluidez que los padres, por lo que es tiempo que los jefes de familia sepan qué es lo que están viendo los chicos, qué tipo de controles pueden hacer y además entrar a aprender. “Creo que esa también es una tarea importante, que el padre de familia reconozca la dimensión de acompañamiento y también se reconozca en un proceso constante de aprendizaje”.


La también directora del Instituto Michoacano de Ciencias de la Educación afirmó que, en estos tiempos de contingencia, que implican un distanciamiento social se tienen que construir espacios de convivencia que permitan sonreír, que nos permitan mantener una beta de esperanza, que nos permitan reconocernos en un fututo porque el miedo que tenemos, el temor que tenemos en este momento al riesgo, al tocar, a la enfermedad, al virus lo trasmitimos y eso afecta a veces mucho más que la enfermedad que esperemos no llegue pero por lo pronto el daño emocional se puede hacer.

Qué pasa aquí entonces, reflexión sobre qué es ser maestro, reflexión sobre lo que es ser padre de familia, lo que realmente puedo hacer y lo que tengo que hacer para que en casa la convivencia de padres, madres, tíos, abuelos, jóvenes pueda ser un espacio de aprendizaje, de salud emocional y de alegría”.

Recomendaciones

  • Se debe entender que este ciclo escolar es atípico, y si bien no se tratará de regalar calificación, sí de ser comprensivo con el desempeño de cada alumno.
  • Los padres no sustituirán la labor de los docentes, pero sí contribuirán a la construcción de los conocimientos.
  • No es adquirirá el nivel de conocimiento que habitualmente se obtiene en el aula, debido a las condiciones naturales, el ambiente y la experiencia de cada docente.
  • Los alumnos deberán contar con el acompañamiento de cualquier adulto que pueda orientar sobre el desarrollo académico.

Mitos y realidades

  • Se aprende lo mismo en casa y en la escuela

MITO: De ninguna manera se puede adquirir el mismo conocimiento, debido a que influye mucho la experiencia y el entorno en el que se desarrollan.

  • Los profesores deben descansar en los padres

MITO: Ningún padre de familia puede asumir el rol de un profesor; lo que se debe hacer es el acompañamiento para que no se pierda lo alcanzado académicamente hablando.

  • El regreso a clases no será igual

REALIDAD: Después de esta experiencia vivida, probablemente el entorno escolar se verá afectado, por lo que será necesario nuevamente adaptarnos a una nueva normalidad.