Buscan imponer megamultas a autolavados, industrias y lavanderías que alteren medidores de agua

Diputadas buscan endurecer las mutas contra el desperdicio de agua potable, pues acusan que las sanciones actuales son tibias.

Foto: Unsplash

Javier Favela / La Voz de Michoacán

Morelia, Michoacán. Draconianas multas para frenar el desperdicio de agua en Michoacán están proponiendo varias diputadas locales. La nueva multa máxima llegaría a un millón 920 mil pesos en contra de las industrias y de las grandes empresas que estén alterando el consumo marcado en los medidores para robarse el vital líquido.

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Asimismo, la nueva multa máxima para autolavados y lavanderías llegaría a los 816 mil pesos por desperdiciar el agua o por alterar los aparatos medidores, según iniciativa para endurecer las sanciones establecidas en la Ley de Aguas y Gestión de Cuencas del Estado.

En Michoacán se desperdicia entre el 30 y 50 por ciento del agua disponible, ya sea en fugas o en malos manejos, de acuerdo con la exposición de motivos de la iniciativa de reforma y adición que firman las diputadas morenistas Julieta García Zepeda y Anabet Franco Carrizales y la verde-ecologista Margarita López Pérez.

La actual multa máxima apenas llega a 2,800 pesos, mientras que la multa mínima vigente asciende a 481 pesos, es decir, pagan casi lo mismo por derrochar agua en una casa-habitación o en una gran empresa refresquera, siendo distintos los niveles de desperdicios.

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Las nuevas sanciones se impondrían a quienes vandalicen aparatos medidores, violen los sellos del Ooapas o retiren los medidores sin autorización, de acuerdo con el anteproyecto. A la fecha, amplias franjas de población carecen del servicio de agua potable y grandes empresas desperdician el agua, lo que genera polarización social.

Sanciones drásticas

Son los ayuntamientos los que aplican las multas por desperdiciar el agua o por alterar los aparatos medidores de consumo del vital líquido. Según la iniciativa de adición a la Ley de Aguas y Gestión de Cuencas del Estado, las nuevas sanciones irían de los 148 mil pesos como mínimo a un millón 920 mil pesos como máximo contra propietarios y poseedores de inmuebles (urbanos o rurales, habitacionales o comerciales), que exploten inmuebles industriales o terrenos agrícolas o ganaderos, si rebasan la pequeña propiedad.

A la fecha, esos infractores solo enfrentan multas máximas de 2 mil 886 pesos, es decir, sin fuerza coercitiva, prefiriendo ir y pagarlas.

Freno al despilfarro

Actualmente no hay diferencias en las multas aplicadas a una casa-habitación o a una empresa multinacional por desperdiciar el vital líquido.

“Los grandes infractores prefieren pagar la multa máxima de 2,886 pesos por desperdiciar el agua, perdiendo así la sanción económica toda su fuerza disuasiva”, señaló Julieta García Zepeda, presidenta del Congreso local.

De acuerdo con la diputada del PVEM, Margarita López, monetariamente, las actuales multas no responden a una medida coercitiva y no son suficientes para la reparación de daños ni significan un ingreso al erario.

“Hay 3 causas del desperdicio del agua: infraestructura deficiente, malos hábitos de consumo en la gente y falta de cultura para aprovechar el agua de lluvia”, indicó la coordinadora de los diputados de Morena, Anabet Franco.