Michoacán, tercer lugar por la cantidad de cortes de luz; en último bimestre "bajan switch" a 39 mil casas

En Morelia y en la Tierra Caliente grupos de familias se han movilizado para exigirle a la Comisión Federal de Electricidad que se les otorguen prórrogas ante contingencia por COVID-19.

Foto. Archivo.

Jorge Manzo/La Voz de Michoacán

Michoacán es la tercera entidad del país en donde la Comisión Federal de Electricidad ha aplicado la mayor cantidad de cortes al suministro, al contabilizarse más de 39 mil tomas afectadas. Las suspensiones se aplicaron entre abril y el 12 de mayo de este año, en plena época de contingencia, y cuando miles de familias vieron interrumpidas sus actividades económicas debido a las restricciones que se tuvieron que implementar para evitar la propagación del coronavirus, lo que limitó los ingresos para cubrir necesidades básicas.

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En Morelia y en la Tierra Caliente grupos de familias se han movilizado para exigirle a la Comisión Federal de Electricidad que se les otorguen prórrogas a fin de que puedan cubrir esos pagos, sin embargo, no han recibido una respuesta satisfactoria, y, por el contrario, en Apatzingán se ha denunciado que en unidades particulares han procedido a la suspensión del servicio, argumentando que no cuentan con unidades oficiales para desplegar a su personal. En Tepalcatepec se tiene el antecedente inmediato de que el pueblo se organizó para evitar que se procediera a la suspensión de la energía.

Los habitantes de regiones deprimidas del estado se quejan de que durante las últimas semanas el recibo de luz ha tenido incrementos inexplicables, por lo que les han exigido respuestas a los funcionarios de la paraestatal. Asimismo, les han argumentado que debido a la contingencia sanitaria no han cuentan con recursos suficientes para cubrir sus obligaciones, por lo que insisten en que se otorguen prórrogas, pues esperan que en cuanto se reactiven las actividades económicas puedan mejorar sus ingresos.

El Estado de México lidera en la cantidad de suspensiones del servicio por falta de pago, en donde se contabilizan más de 48 mil tomas. Le siguen con más de 43 mil hogares con medidores inhabilitados en los estados de Jalisco y Ciudad de México, mientras que en la tercera posición se ubica Michoacán; no se detallan las localidades que tienen la mayor incidencia. Después se encuentran Puebla, Guerrero, Veracruz, Sonora y Sinaloa, según el reporte que ha sido revelado por la Comisión Federal de Electricidad. 

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Se desatan las protestas

A nivel nacional, ya se han registrado protestas en varios estados, argumentando que se tiene un incremento en las tarifas, incluso del doble de lo normal, sin embargo, la Comisión Federal de Electricidad ha asegurado que no se tuvieron alzas en las tarifas, sino el ajuste inflacionario, mismo que coincide con la temporada de escases de recursos debido a la pandemia por el coronavirus.

No obstante, la Comisión Federal de Electricidad a mediados de abril emitió un acuerdo que permite que usuarios domésticos de tarifas no tengan incrementos que se presenten en sus consumos durante el resguardo domiciliario a consecuencia de la emergencia sanitaria. Este acuerdo protege a 39 millones de hogares atendidos por la paraestatal. En otras palabras, ningún usuario de las tarifas 1, 1A, 1B, 1D, 1E y 1F será reclasificado a la tarifa doméstica de alto consumo.

De esta forma, desde marzo y hasta que dure la emergencia, la CFE debe permitir la permanencia de quienes se excedan de los límites del alto consumo, en una tarifa de bajo consumo. Sin embargo, las quejas se han desatado en varios países, y también en Michoacán, y denuncian que no ha sido cumplido ese acuerdo acordado también por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. En algunos casos, han afirmado que llegan hasta cinco veces más que el de dos bimestres anteriores, es decir, noviembre-diciembre y enero-febrero.

No tienen ni para comer

Hay hogares en Michoacán que apenas y logran reunir recursos para atender necesidades básicas como el alimento, debido a que en sus trabajos han tenido que suspender actividades, y se les están pagando salarios mínimos, a fin de que no sean despedidos. Sin embargo, otros corren con menos suerte debido a que han tenido que dejar sus empleos porque las empresas ya no pueden pagarles, o han bajado las cortinas. Esta situación se agudiza en estos momentos de la contingencia, cuando ya han transcurrido dos meses de que se decretó el aislamiento obligatorio.

En Apatzingán, un grupo de ciudadanos ya bloqueó el movimiento de unidades de la Comisión Federal de Electricidad a fin de que no procedan a la suspensión del suministro. Habitantes se dicen desesperados de que los créditos que han ofrecido las instancias de gobierno no son suficientes para atender sus necesidades básicas. Incluso, en el campo tuvieron que recortar la cantidad de jornales, debido a que los principales centros de abasto del país también limitaron sus operaciones.

Esta situación también pega a profesionistas, quienes incluso, ya han pedido al gobierno que se decrete una emergencia económica, debido a que consultorios médicos se han visto en la necesidad de cerrar sus puertas debido a que ya no pueden sortear la crisis. Los gobiernos del Estado y Federal han ofrecido créditos a fin de que no suspendan actividades los negocios formales e informales, pero habitantes afirman que no son suficientes, pues la crisis ya les alcanzó.

Panorama nacional

De acuerdo con información que publica El Universal, durante la fase 3 de la pandemia, Comisión Federal de Electricidad (CFE) ordenó el corte del servicio porque 543 mil 128 usuarios no pudieron pagar su factura entre abril y el 12 de mayo.

De ese total, 91 mil 381 servicios, entre hogares, comercios, prestadores de servicios, industrias se quedaron sin el suministro de energía eléctrica en la Zona Metropolitana del Valle de México, incluida Ciudad de México y Estado de México, considerado el centro de la pandemia, según refiere el diario nacional.

El director de CFE, Manuel Bartlett, había advertido que no aplazaría ni condonaría las facturas de los hogares mexicanos porque también hay gastos que cubrir, como el pago de 90 mil trabajadores y la compra de combustible para que la red eléctrica siga suministrando el servicio.