Más de mil niños sufren explotación en Morelia

En marzo de este año el DIF Municipal de Morelia informó que el último censo del 2019 incluía a 200 niños o adolescentes bajo condición de explotación en los cruceros de la ciudad

Foto: La Voz de Michoacán.

Héctor Jiménez / La Voz de Michoacán

Morelia, Michoacán. Datos de dependencias municipales apuntan a que  al menos 1 mil 200 menores de edad laboran en Morelia y aproximadamente 200 de ellos se encuentran diariamente en diversos cruceros de las calles de la ciudad capital, a la par que también se han observado infantes presuntamente traídos desde otros puntos de la República Mexicana para laborar vendiendo productos o pidiendo dinero en semáforos. 

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Si bien es importante recordar que la recopilación de estos datos se torna complicada porque los menores evitan dar información a las autoridades, en marzo de este año el DIF Municipal de Morelia informó que el último censo del 2019 incluía a 200 niños o adolescentes bajo condición de explotación en los cruceros de la ciudad. Es decir, que una fracción de aproximadamente mil niños más trabajarían en puntos que no son las vías públicas.

"Lamentablemente se percibe en las calles, en los cruceros, no dejan de verse niñas y niños trabajado y siempre se percibe también un adulto. Desafortunadamente se están violando sus derechos como niños. La ciudad de Morelia tiene un registro de aproximadamente 1 mil 200 niños laborando, según lo que comenta la directora del Sistema DIF Municipal”, expresó el regidor en el pleno del Cabildo de Morelia.

Sobre esa línea, el integrante de Cabildo comentó que el DIF no cuenta con un censo preciso, pero se conocen por lo menos seis puntos de la ciudad que funcionan como focos de este fenómeno.

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“Desafortunadamente no se han presentado cifras exactas pero esté ese dato y según este mismo censo principalmente se encuentran estas niñas, niños y adolescentes en los cruceros de la salidas Salamanca, Quiroga, Mil Cumbres, en algunos cruces con Camelinas, sobre el Río y por supuesto también en el centro histórico, en el Acueducto y hasta donde finaliza”.

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En ese sentido, se aprobó el punto de acuerdo que “Instruye al Sistema DIF, a través del Centro de Atención a Menores y Adolescentes en Riesgo (Camar) y al sistema Municipal de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes de Morelia (Sipinna) para que remitan un informe detallado a esta Cabildo sobre las acciones que han emprendido para atender y revertir la problemática de niños en situación de calle y trabajo infantil”.

NIÑOS QUE NADIE VE

El regidor hizo referencia al reciente reportaje de La Voz de Michoacán “Niños que nadie ve”, en el que se describe la situación de niños y niñas de cerca de 10 años de edad que fueron ubicados en algunas de las principales avenidas de la ciudad y que presumiblemente fueron traídos desde Chiapas para sufrir de explotación infantil en las calles de la capital michoacana.

Esa luz roja se ha convertido en lo que marca su vida. “Juanito” se levanta y regresa a la rutina de intentar malabarear, fallar, caminar entre carros y recibir algunas monedas que celosamente se guarda en el bolsillo. Nadie le presta atención: como decenas de niños en Morelia, ahí está, pero casi nadie lo ve”, se lee en el reportaje de esta casa editorial.

El regidor destacó que “Esto fue realizado con estricto profesionalismo y rigor periodístico, poniendo sobre todo un énfasis en el sentido humano y social. Se menciona a un niño de aproximadamente 10 años de edad que se encuentra o encontraba en la avenida Nocupétaro intersección con Madero Poniente. Lo que se comenta es que su rostro desafortunadamente no refleja ninguna emoción, no sonríe, ni siquiera intenta jugar con esas pelotas para malabarerar. No juega como lo haría otro niño”.

Las declaraciones del DIF Municipal apuntaban a que el censo de 200 niños reportado a finales de marzo recaía sobre menores de edad que se ubicaban en los cruceros laborando junto con el resto de sus familias, sin embargo, en el reportaje de La Voz de Michoacán se ubicaron a adultos que aparentemente solo vigilaban y proveían de agua y alimentos al menor de edad.