EXCLUSIVA | ¿Es el momento de los empresarios? Valentín Rodríguez, el aguacatero que busca la gubernatura

El empresario aguacatero de 59 años de edad ha sido dos veces presidente municipal de Tacámbaro y diputado local; ahora busca gobernar Michoacán.

Foto: Víctor Ramírez. Diseño: La Voz de Michoacán.

Jorge Manzo / La Voz de Michoacán

Morelia, Michoacán. “No tengo necesidad de robar, además de que no es mi estilo, ni conducta”, atajó el empresario Valentín Rodríguez Gutiérrez, quien compartió que tiene la aspiración de contender por la gubernatura de Michoacán, cobijado por los colores de la oposición a Morena. Sentenció que a los gobernantes les ha faltado esa visión empresarial que a él le ha resultado exitosa en sus negocios, para conseguir gobiernos eficientes.

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En el estudio de Ruta 20-21, confesó que él busca encabezar los esfuerzos de los michoacanos de una manera diferente y dijo estar convencido de que eso es posible. Admitió que donde hay problemas también hay muchas oportunidades y él las ve en Michoacán. “Yo no sé si sea tiempo de los empresarios, lo que sí sé es que es tiempo de encabezar un gobierno con una visión diferente de la que hasta ahora se ha hecho”.

Compartió que su inquietud de regresar a la política surge de hacer un análisis de lo que pasa en Michoacán y de lo que “no nos gusta que está pasando y que no es lo que queremos, y lo que no quiero para mí, para mis hijos y nietos”. En ese análisis en familia, surge la inquietud de aspirar a la gubernatura y comenzó el recorrido, que también contempla diálogos con políticos “que tienen el poder de tomar las decisiones”.

Valentín Rodríguez tiene 59 años de edad. Es empresario aguacatero y ha sido alcalde de Tacámbaro y diputado local. Es generador de más de mil 500 empleos directos. Él garantiza tener la autoridad moral para hacer las cosas en Michoacán. Ya platicó con el gobernador Silvano Aureoles Conejo, con jerarcas católicos, líderes empresariales y líderes de opinión, y sigue en diálogos con productores de mango, limón, aguacate, sorgo, pesca y otros.

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“Estoy en esto y voy a hacer lo que tenga que hacer, y lo que la ley permita para lograr conocer y que me conozcan y sepan cuál es la intención y por qué quiero”, afirmó Rodríguez Gutiérrez, quien a la vez destacó que su objetivo es encabezar el bloque opositor y colocarse los ropajes del PAN, PRD, Movimiento Ciudadano y del PRI. “De no ser así, definitivamente no iría yo como un candidato de un solo partido”.

Expresó que si los michoacanos en general, de las diferentes militancias y simpatías partidistas, coinciden en un propósito, no le preocupa Morena. Asumió que, para conseguirlo, deben poner todo para construir y hacer un compromiso con la sociedad. Destacó que el gobernador Aureoles tiene sus méritos y seguramente también sus aciertos y resaltó que sí es una carta de presentación que pueda abonarle a la construcción de la alianza.

Admitió que Cristóbal Arias es un político que tiene experiencia, sin embargo, desde su juicio no deja de ser un político y la gente ahora lo que no quiere es un perfil como ese. Refirió que está muy lejos de que se repita el tsunami político que impactó en 2018, pues reflexionó que entre la sociedad hay conciencia y conocimientos y ve madurez. Aclaró que él quiere ser el candidato de la sociedad, no sólo del gobernador como ha trascendido.

Mencionó que en caso de que el bloque no lo favorezca con la postulación, él no hará caprichos ni berrinches y que como un hombre maduro estará apoyando al proyecto que sea más viable para Michoacán. “Me gustaría ser gobernador porque sé que se pueden hacer las cosas diferentes, sé que con esfuerzo de todos los michoacanos, con la calidad que tenemos, con los recursos que se tienen, y todas esas bondades, hay oportunidades para lograr esos cambios”.

Afirmó que todo eso es posible. Los desafíos que ve están en materia de seguridad, educación, salud, empleo “pero que sean bien remunerados”. Él le apuesta no a generar empleos en el gobierno, sino en las empresas e industrias. Plantea generar condiciones para la inversión garantizando un estado de derecho para que tengan seguridad los inversionistas.