4 mil desaparecidos más una cifra negra. Para la búsqueda, poco dinero y mucho riesgo

En lo que va de 2020, la Comisión de Búsqueda de Personas Desaparecidas en Michoacán ha recibido 226 reportes de extraviados, de los cuales 109 se han localizado –96 vivos y 13 fallecidos–.

Foto: La Voz de Michoacán.

Juan Carlos Huante / La Voz de Michoacán.

Morelia, Mich. De acuerdo con datos de la Comisión de Búsqueda de Personas Desaparecidas en Michoacán, en la entidad hay un aproximado de 4 mil desaparecidos, pero el número puede ser mayor si se toma en cuenta que hay una “cifra negra”, reveló el titular de esta dependencia, Marco Antonio Hernández Zaragoza; en lo que va de 2020 –señaló– se han recibido 226 reportes de extraviados, de las cuales se han ubicado 109, 96 de ellos vivos y 13 fallecidos, mientras que siguen en la búsqueda de 117 más.

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“La cifra negra son las personas que no presentan denuncias penales, que no acuden con nosotros y que de manera oficial no se sabe quiénes son; sólo de manera extraoficial podemos enterarnos nosotros, por las mismas personas o por otras, que han desaparecido de sus domicilios, que se los han llevado. Entonces hay una cifra negra que no podemos contabilizar por obvias razones”, dijo el funcionario.

Limitaciones económicas, meterse en “terrenos prohibidos”, recurrir a métodos remotos para descubrir un cadáver enterrado a través del olor…, son solo lagunas situaciones a las que se enfrenta la Comisión de Búsqueda de Personas Desaparecidas.

En exclusiva para La Voz de Michoacán, Hérnandez Zaragoza, quien asumió la responsabilidad de la comisión el 18 de junio del año pasado, señaló como focos rojos en desapariciones municipios como Zamora, Sahuayo, Lázaro Cárdenas y Morelia, de los cuales, en la capital michoacana se concentra la mayor cantidad, así como en la región occidente de la entidad, como Zamora, Jiquilpan, Tingüindín, entre otros.

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Asimismo, informó que este año se busca para la comisión un presupuesto de 18 millones de pesos, recurso con el cual se tiene contemplado construir un panteón forense en Morelia para concentrar los cuerpos encontrados y sea más fácil su identificación.

“Nos hemos dado cuenta que la Fiscalía General tiene fosas comunes en varios municipios del estado y nosotros lo que queremos es que todos los cuerpos que se localicen de personas no identificadas vengan al panteón forense y los familiares no tengan que andar den lugares alejados que no conocen, porque muchas de estas personas que han fallecido no son de Michoacán, no son de Morelia, son de otros estados”.

– Del registro de 4 mil desaparecidos, ¿qué porcentaje es catalogado como privados de su libertad?

– Yo ahorita no me atrevería a darte esa cifra, toda vez que las cuestiones de delitos y todo esto lo maneja principalmente la Fiscalía. Si nosotros localizamos a una persona, viva o no viva, hacemos nuestro registro de que esta persona se encontró en estas condiciones y derivado de estos actos, pero no sabemos verdaderamente las razones, las razones de fondo las sabe la Fiscalía, porque son los que llevan a cabo autopsias, investigaciones, entrevistas, etcétera, etcétera.

– ¿Tienen registro de fosas clandestinas?

– Nosotros hemos participado muy poco en fosas, porque la descripción y la ubicación de las fosas las tienen las personas, y esas personas, vía declaración, vía entrevista que se hace ante el ministerio público, son los que denuncian la ubicación de esas fosas. Sí hemos ido a búsqueda de fosas, no hemos corrido con la suerte, no hemos localizado ninguna hasta ahorita, pero Fiscalía sí ha localizado varias por obvias razones, porque ellos llevan los expedientes, ellos tienen la denuncia.

Foto: Twitter @BusquedaMich.

La búsqueda es sin distingos

El objetivo de la Comisión de Búsqueda de Personas en Michoacán –de la que forman parte antropólogos, arqueólogos y criminólogos, entre otros perfiles– es buscar, localizar, identificar y entregar personas a sus familiares, sin importar incluso si las víctimas tienen vínculos delictivos, caso que le corresponde a las autoridades competentes determinar e investigar.

“Nosotros no investigamos cuestiones delictuosas, delictivas; nosotros investigamos las razones por las que pudo haber desaparecido una persona (…). Nosotros tenemos que atender por igual a hombre, mujeres, personas de la diversidad sexual, personas que tengan alguna discapacidad, nosotros atendemos a la persona por el solo hecho de ser persona y la tenemos que atender con respeto, con sensibilidad, con muchos requisitos que no cualquier servidor público, no cualquier abogado o profesionista pudiera ser; se requieren ciertos estudios para tener cierta sensibilidad”, recalcó.

La búsqueda inicia de inmediato una vez que se recibe el reporte –detalló el abogado–, no esperan 72 horas, y si durante este lapso no hay resultados y se determina que la persona fue privada de su libertad o se establece como indicio principal la comisión de un delito, entonces se turna el caso a la Agencia del Ministerio Público de Antisecuestro. Y se trata de menores de edad, con urgencia se avisa a la Fiscalía para levantar la alerta Amber y comience la intensa búsqueda.

“Es una búsqueda muy grande, muy extensa, que afortunadamente nos ha dejado muchos, muchos éxitos, porque hemos logrado rescatar personas que estaban en verdadero peligro y que, de no haber intervenido con esa celeridad y con esa inmediatez, estas personas no sabríamos dónde estarían o cuál sería su paradero, como hay tantas otras que desgraciadamente no hemos podido localizar aún, o que no hemos podido localizar con vida, en algunos casos”.

Foto: Twitter @BusquedaMich.

– ¿Cómo es el protocolo?

– Los reportes nosotros los recabamos de diferentes formas. La comisión de búsqueda tiene un área de análisis de contexto, que es la que se encarga de manejar las redes sociales que tiene la comisión de búsqueda, Facebook, Twitter, el correo electrónico oficial, en donde nosotros estamos difundiendo todas las acciones de búsqueda que realizamos. El reporte nos puede llegar a nosotros vía el usuario directamente, vía la Fiscalía, y cuando ésta considera que no hay la constitución de un delito y que nos corresponde a nosotros, nos lo remiten e inmediatamente nos enfocamos a buscar; también esta misma área de análisis de contexto está monitoreando las redes sociales para ver cuando un particular sube un reporte, que no se recomienda, sin embargo, nosotros lo tomamos, hablamos para hacerlo oficial o para corroborar si ya apareció esta persona, si no, inmediatamente hacemos nuestro propio reporte y lo empezamos a difundir.

El titular de la Comisión de Búsqueda de Personas en Michoacán recomendó bajar de las redes sociales información personal relacionada con desaparecidos, como números de teléfono, para evitar ser víctimas de una extorsión.

También hay colaboración con la Comisión Nacional de Búsqueda, la Fiscalía de la República, la Cancillería, la Secretaría de Relaciones Exteriores, el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública y las comisiones locales de las entidades federativas, así como organismos homólogos en Estados Unidos.

Al respecto, ejemplificó que se han dado casos de personas que se extravían durante el trayecto de un viaje y han sido encontradas en otras entidades, como la de un migrante que no logró cruzar al territorio estadounidense y fue localizado en Nuevo León, u otro ubicado en Houston, EUA, el cual estaba en proceso de ser trasladado a Chicago por estar acusado de un delito.

Por su parte, a los familiares de los desaparecidos o que los han encontrado sin vida, se les brinda acompañamiento psicológico, jurídico, además se les canaliza y acompaña en la Comisión de Atención a Víctimas del Estado para que reciban terapias psicológicas de más largo plazo, entre otros servicios.

Crédito a los colectivos de búsqueda

“Como defensor de derechos humanos de más de 20 años en Michoacán, yo he visto el surgimiento y la fuerza que han tomado estos colectivos y también de la severidad de las acusaciones y de las solicitudes que ellos hacen tanto al gobierno federal como a los gobiernos locales”, destacó Marco Antonio Hernández Zaragoza.

El servidor público puntualizó que tanto a nivel nacional como estatal se han dado a la tarea de trabajar de la mano con los colectivos y “los estamos atendiendo; ellos tienen múltiples demandas, múltiples quejas, y nosotros estamos mostrando este rostro, esta cara de lo que es la Comisión de Búsqueda de Michoacán, para que vean que nosotros somos sus aliados, que vamos de la mano con ellos a donde nos digan, simplemente vamos a tomar las precauciones necesarias”.

Otorgó el crédito a los colectivos y familiares que muchas veces tienen indicios de dónde pueden estar las personas desaparecidas, si es que están con vida o no.

“Cuando no están con vida y se puede tener la noción de que están enterrados en algún lugar, en alguna región, ellos nos lo refieren y nosotros tomamos las medidas necesarias para hacer acciones de búsqueda en campo; ahí es donde precisamente entran en acción los antropólogos, arqueólogos y criminalistas, para poder ver los indicios, para ver datos de dónde pudieran encontrarse”.

“Hay que entender y hay que estar bien claro que las principales fosas las han localizado los colectivos y los propios familiares”, destacó.

Las dificultades

“Tenemos que trabajar con lo que tenemos”, manifestó Hernández Zaragoza, debido a las necesidades y prioridades económicas que tiene el gobierno de Michoacán.

Si bien con el presupuesto del año pasado, de 11 millones de pesos, la Comisión de Búsqueda de Personas en Michoacán adquirió equipo necesario para la labor en campo –un GPR, vehículos, drones, detectores de metales, picos, palas, cascos, arneses, cuerdas, además de la contratación de profesionales–, a veces se ha recurrido a mecanismos remotos riesgosos, pero que han dado resultados. Por ejemplo, con una varilla tipo T, de un metro 20 centímetros.

“Hay gente que lo hace y nos ha enseñado a hacerlo; en donde se ve el suelo parejo, pero en alguna zona está anormal o se ve un hundimiento o alteración, en ese lugar metemos la varilla y al sacarla hay que olerla para ver si huele como un cadáver, y así es como se han localizado fosas clandestinas en diferentes estados de la República”, relató.

Los riesgos

Las características topográficas de las zonas de búsqueda o adentrarse en terrenos con presencia de la delincuencia, son dificultades que enfrenta la búsqueda de personas.

Una, es el peligro de sufrir un accidente, enlistó el funcionario. La segunda, meterse en lugares donde se pueden “tocar intereses de otra índole”.

“Cuando subimos drones para ver la geografía, para ver si hay ríos, si hay barrancas, para ver cómo está el terreno, inmediatamente los propios lugareños nos alertan: ‘si subes un dron te lo van a bajar a balazos, ten cuidado, no lo subas’, y pues ya desde ahí vamos un poco estresados, porque si van a bajar el dron a balazos, quién sabe qué nos pueda pasar a nosotros”.

– ¿Amenazas, intimidaciones…?

– Hemos tenido.

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Exhorto

Marco Antonio Hernández Zaragoza, titular de la Comisión de Búsqueda de Personas Desaparecidas en Michoacán, también exhortó a evitar un desgaste –lo dice en el mejor de los sentidos–, al activar protocolos inmediatos de búsqueda donde se involucran diversas corporaciones de seguridad estatales y federales, y las personas ‘aparentemente’ desaparecidas simplemente se fueron sin avisar o de fiesta.

“Hemos encontrado personas en el Festival Cervantino, en Guanajuato; en Ixtapa, Guerrero; en Tzintzuntzan por el Día de Muertos…”. O se da el caso de que una persona simplemente no quiere vivir ya con la familia por ser mayor de edad, pero al no avisar, la familia reporta la desaparición y al encontrar a la presunta víctima, ésta se molesta.