La Voz, 71 años en la vida de los michoacanos

La Voz de Michoacán. Las últimas noticias, hoy.

Foto: La Voz de Michoacán.

Entre las metas que tiene el equipo entero de La Voz, es contar historias que cumplan con las necesidades de los lectores, que sean útiles, excelentes y funcionen mejor para las personas. 

 

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Omar Cuiriz / La Voz de Michoacán

Morelia, Michoacán. Corría 1948, una fuerte inquietud, que antes sólo flotaba por los aires del estado, se materializaba: Las injusticias y la verdad debían contarse a todas las personas que pisaban las tierras michoacanas.

No era una tarea cualquiera, de ella dependía que la sociedad tuviera ante sus ojos todos los hechos que llegaban a afectarle. La rigurosidad, la seriedad y la fidelidad a la realidad, serían parte de los pilares que sostendrían al periódico que se convirtió en líder y que marcaría a toda una época: La Voz de Michoacán.

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Esta casa editorial no habla en pasado para medir el compromiso y los logros, pues la décadas de trabajo han abierto un camino que se vislumbra largo, además de nuevos objetivos que mantienen a esta casa editorial firme, objetiva y participando en las tendencias que está marcando al periodismo digital.

Hace 71 de años nació un proyecto con un único objetivo: decir la verdad, exigir justicia para los sectores a los que han violentado sus derechos humanos y desmantelar las condenables acciones de autoridades.

El equipo que conforma a esta casa editorial es consciente de que el tiempo actual en el que actúan las nuevas generaciones tiene particularidades, características y necesidades inéditas; por esa razón La Voz de Michoacán trabaja en nuevos procesos de análisis y de operación para contar con las herramientas más poderosas y hacer frente al ritmo que pauta la era digital, lo cual ya es visible en los contenidos que difunde.

Entre las metas que tiene el equipo entero de La Voz, es contar historias que cumplan con las necesidades de los lectores, que sean útiles, excelentes y funcionen mejor para las personas.

Actualmente quien dirige los pasos de esta casa editorial es el director general, Alvaro Medina, quien está comprometido con los pilares que formaron esta empresa pero con la mirada en el futuro pensando siempre en ser la opción para los lectores y usuarios nuevos que se suman día a día.

 

Foto: La Voz de Michoacán.

Historia

Fundada en 1948 por José Tocavén Lavín, La Voz de Michoacán inició sus actividades en los años de las posguerra de la década de los años 40´s, en el marco de un México que apenas desarrollaba sus bases para la consolidación de un país democrático posrevolucionario y encabezado por un gobierno emanado del proceso de 1910.

En primera instancia, se consideró que este nuevo diario michoacano tuviera el nombre de “Discusión”, sin embargo y luego de un exhaustivo análisis, se llegó a la conclusión de que se llamaría La Voz de Michoacán, “Un periódico de Michoacanos para los Michoacanos”.

Su aparición diaria no fue posible sino hasta 1953, ya que en sus primeros años se trataba de una publicación semanal. Y es que este rotativo nació en la calle Morelos del Centro Histórico, cuando en una cantina de nombre Zirahuén, don José Tocavén Lavín platicaba con José Villanueva y otros amigos sobre el sueño de tener en la ciudad un medio impreso que plasmara el entorno social, político y económico de mediados del siglo XX.

Una de las primeras facturas que el deseo de libertad de expresión pasó a este diario fue cuando La Voz comenzó a dar seguimiento a los manejos irregulares del entonces gobernador José María Mendoza Pardo, y la cereza del pastel de esas notas fue el encabezado en portada “Cayó el sátrapa”, del viernes 28 de agosto de 1949, que exhibe la caída del mandatario luego de una serie de publicaciones que denunciaron la fuerza excesiva de los agentes del orden, y que le costaron la vida a un par de estudiantes nicolaitas.

Esa fue las primeras planas que cimbraron a más de alguno en las estructuras de poder y que consolidaron a este diario como un líder de opinión en Michoacán, y fue por ese espíritu de denuncia que poco a poco se fue ganando uno de los bienes más preciados de cualquier medio de comunicación: la confianza de la sociedad; profesionistas, jornaleros, obreros, estudiantes, comerciantes, en las oficinas, en los hogares, en camiones, negocios, cafés y en los espacios públicos se leía un ejemplar de La Voz de Michoacán.