Aseguran que con la GN es suficiente y no pedirán refuerzos federales; octubre fue el mes más violento

El titular de la SSP, José Alfredo Ortega ha dicho que la Guardia Nacional tiene el estado de fuerza suficiente y que hay excelente relación con los mandos territoriales

Arturo Molina / La Voz de Michoacán

Morelia, Michoacán.- A pesar del incremento en la tendencia de fenómenos delincuenciales como homicidio doloso, grupos de civiles armados, narcomenudeo y secuestro, el Gobierno de Michoacán descarta solicitar refuerzos al gobierno federal a través de las distintas corporaciones.

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Tanto el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla como José Alfredo Ortega, titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), han manifestado las bases de Guardia Nacional y de la Armada que ya vigilan la entidad cuentan con el estado de fuerza ideal para contener una ola delictiva que en octubre pasado alcanzó su pico más alto en la historia reciente.

Cuestionado por la Voz de Michoacán sobre el estado de fuerza desplegado por la Guardia Nacional, el mandatario Ramírez Bedolla ironizó respecto a informar sobre el despliegue operativo en las distintas regiones del estado.

Apenas en días pasados, al menos un alcalde señaló la falta de coordinación con la Guardia Nacional ante los problemas de narcomenudeo y homicidios se mantienen en franco incremento en las demarcaciones.

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“Está reforzada la seguridad, ayer tuve reunión con los generales de las 21 y la 43 Zona militar para atender. Sí hay en Morelia, hay dos cuarteles y están operativos. No, imagínate que te dé las cifras de estado de fuerza de la Federación. No podemos compartir esa información”, argumentó el mandatario, pese a que era información que regularmente se brindaba en cuanto a datos en bruto.

A inicios de esta semana, Ramírez Bedolla anunció que no se permitirá la presencia y crecimiento de los grupos de civiles armados que se denominan como autodefensas. Incluso, reveló operativos de desarme para las más de 10 demarcaciones en dónde prevalece dicha condición, incluyendo Pueblos Unidos.

Respecto a la coordinación con los municipios, el gobernador insistió en que se mantendrán las mesas de trabajo aún con quiénes no quieran firmar el convenio de seguridad propuesto.

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Sobre a la negativa del gobierno municipal de Morelia de signar el convenio, el jefe del Ejecutivo estatal insistió en que esta misma semana se habrá de reunir el titular de la Secretaría de Seguridad Pública para establecer procesos de coordinación con la capital michoacana.

“Nosotros no obligamos a nadie. Habrá una reunión entre el presidente municipal y el secretario de seguridad pública en próximos días para dialogar por ese acuerdo y estamos trabajando de manera coordinada. Veremos qué se reúnan como ya se ha dado”, explicó.

Por su parte, el general José Alfredo Ortega, titular de la SSP, aseguró que actualmente la Guardia Nacional y la Secretaría de la Defensa Nacional sostienen un estado de fuerza suficiente para atender los distintos fenómenos generadores de violencia.

Eso yo le pediría que se lo pregunte a la Guardia Nacional, pero yo veo que aquí la Guardia tiene el estado de fuerza suficiente. El estado lo plantea, pero eso lo define la Guardia Nacional, pero tiene los elementos suficientes para actuar en coadyuvancia con nosotros. Hay una excelente relación con los mandos territoriales de la 21 y la 43 Zona Militar. Nos reunimos a diario en las mesas de seguridad”, explicó.

CRECE PRESENCIA DE CÁRTELES CRIMINALES

A su llegada al poder, el nuevo Gobierno del estado reconoció la presencia de 12 carteles que se disputan el control de actividades delincuenciales en territorio michoacano. Dicho fenómeno, es el principal motor de la incidencia delictiva y de violencia generalizada tanto en las zonas urbanas como rurales.

Las 113 demarcaciones del estado registran ocupación de los grupos delictivos cuya autodenominación y “marcas”, se han reservado por motivos de investigación y competencias de la estrategia federal de seguridad.

Los puntos en dónde se genera la mayor incidencia de enfrentamientos se ubican entre los límites de Michoacán y Jalisco en dónde más de una decena de demarcaciones presentan las incursiones del cártel Jalisco que se ha topado con al menos cuatro carteles locales.